I can't believe how pianistically sound these 1937 recordings by Schnabel . The control ,voicing is superb , musical .the double notes sound like he is weighting and his ears must be remarkable . This is what I expect in the sonatas and the Brahms concerti but have never heard from Schnabel ,. Would like to hear him in the chamber works now . The musicianly playing here is remarkable .
18:42 ..... Schnabel travelling on the very edge of pure miracle , kissing the unspeakable in some higher cosmos , telling us an uninimaginable encounter we are all dreaming of , incredible moment .......
Schnabel had small hands. He could barely stretch an octave. When he applied to serve in the army during WW1, he was rejected as unfit. A colleague quipped, “Of course! No fingers!”😂
I've just been listening to Kempf's recording of these. Both are beyond mere musicianship and both are beyond superb. And they are so different from each other!! Thanks as always to incontrario motu. More hidden treasures please.
Si entendemos bagatelas por menudencias, sería un dislate pensar que por minúsculas carecen de valor. La Naturaleza en sus líquenes prueba hasta qué punto estos organismos minúsculos son esenciales para la vida, tanto por la belleza de sus formaciones, como por ser colonizadores primarios e indicadores biológicos excepcionales. En el arte ocurre otro tanto. En orfebrería, pintura o dulcería, alhajas minuciosas, filigranas, miniaturas o golosinas sembraron las culturas de piezas altamente preciadas. Nada extraño pues que Beethoven fuera prolífico en formas diamantinas, a modo de ejercicio pausado o audaz Beethoven escribiría una constelación de piezas diversas, talladas con atinado esmero para placer de los sentidos y alimento del alma. De los tres cuadernos que Beethoven dedicara a las bagatelas, esta tolvanera del Op. 126 que Beethoven juzgaría en su carta al editor Schott como «muy elaboradas, ver probablemente las mejores que haya compuesto en este género» y publicadas en 1825 con una dedicatoria a su amado hermano Johann, ponen de manifiesto su maestría en lo pequeño como en lo grande. Comentario y dedicatoria bastarían para definirlas: precisión y hondura. No obstante, dos apreciaciones me parecen oportunas. Amén de aquella que les consagrara Romain Rolland en su libro sobre Beethoven -obra que os invito a tener como compañera de viaje-, retengo la del maestro Adorno. El nóbel francés anotó en su día : «Un supremo dominio del arte distribuye los matices con propiedad y precisión; jamás Beethoven supo dedicar tal valor al detalle […]. Si el orden de estos seis “Stimmungsbilder ” tan variados como fueran, nada fortuito, sino meditado, nos autoriza a indagar el desarrollo de una jornada del alma de Beethoven y la sucesión de sus asociaciones y sentimientos. Leemos con mayor nitidez que en las grandes obras, obedientes a su propio plan imperativo, la movilidad extrema de este espíritu, capaz se apreciar la paz más pura y sus delicias, pero cuya puerta está constantemente abierta al soplo de la inquietud». En cuanto al maestro Adorno, sin duda alguna el filósofo que mejor entendió la música contemporánea y las raíces que la precedieron, señala a propósito de estas seis bagatelas: «Insociable, el último Beethoven se niega a la música doméstica. Ante los últimos cuartetos, el aficionado a las cuerdas se queda perplejo; ante las últimas sonatas y las Variaciones Diabelli la perplejidad la siente el aficionado pianístico: al tocar y, bastante fácilmente en consecuencia, también al oír. Al paisaje petrificado no conduce ningún camino cómodo. Pero cuando Beethoven hizo hablar a la piedra sacando de ella figuras con el escoplo, al terrible golpe volaron las esquirlas. Y así como el geólogo es capaz de reconocer a partir de minúsculos fragmentos diseminados la verdadera composición de estratos enteros de tierra, así las esquirlas dan testimonio del paisaje del que proceden: los cristales son los mismos. El propio Beethoven las llamó bagatelas. No son meramente esquirlas, ni documentos del proceso productivo más potente de la música, sino que su extraña brevedad revela al mismo tiempo ese raro encogimiento y tendencia a lo anorgánico que conduce al secreto más íntimo del último Beethoven lo mismo, quizá, que de cualquier gran estilo tardío. Aunque generalmente incluidas en el conjunto de las “piezas para piano” de Beethoven, no son ni de lejos tan conocidas como las sonatas: es como si en su atmósfera se respirara con dificultad. Pero la fatigosa respiración la compensan con formidables perspectivas para la vista» .
Wunderschöne Interpretation dieser fein komponierten Bagatellen im gut phrasierten Tempo mit anmütigem Anschlag des Klaviers und angenehmer Dynamik. Die Tonqualität ist erstaunlich hoch als eine Aufnahme von fast achtzig Jahre vor zur Zeit des Hochladens. Alles ist ausgezeichnet!
I can't believe how pianistically sound these 1937 recordings by Schnabel . The control ,voicing is superb , musical .the double notes sound like he is weighting and his ears must be remarkable . This is what I expect in the sonatas and the Brahms concerti but have never heard from Schnabel ,. Would like to hear him in the chamber works now . The musicianly playing here is remarkable .
Such limpid phrasing. Schnabel channels Beethoven's innermost creativity.
Schnabel's amazing sense of form and emotional essence of the work...🧐👍👍
Absolutely sublime -- thank you so much for posting this.
I came searching for the bagatelles op 126 and never thought I would come across this gem.
A wonderful talent, Schnabel, a sensitivity and understanding of what is written in the staff, view little.
Beautiful! Thanks for sharing!
Beautiful playing, strict but free and very rhytmic at the same time.
18:42 ..... Schnabel travelling on the very edge of pure miracle , kissing the unspeakable in some higher cosmos , telling us an uninimaginable encounter we are all dreaming of , incredible moment .......
Well said.
I couldn't say it better. The quiet, meditative quality of this piece says something about Beethoven's final years.
Schnabel makes every note a pearl, lustrious by itself, magical in the string.
The boss of Beethoven's interpretations
Wonderful!
Transcendental!!!!!!
That's right at all!
Understatement.
Легендарный . Бетховен Людвиг был БОГ
Schnabel had small hands. He could barely stretch an octave. When he applied to serve in the army during WW1, he was rejected as unfit. A colleague quipped, “Of course! No fingers!”😂
I've just been listening to Kempf's recording of these. Both are beyond mere musicianship and both are beyond superb. And they are so different from each other!! Thanks as always to incontrario motu. More hidden treasures please.
Sublime!
Exactly!―Just so!
Of course one can find cleaner playing, but I think Schnabel brings out the genius of Beethoven better than anyone.
Si entendemos bagatelas por menudencias, sería un dislate pensar que por minúsculas carecen de valor. La Naturaleza en sus líquenes prueba hasta qué punto estos organismos minúsculos son esenciales para la vida, tanto por la belleza de sus formaciones, como por ser colonizadores primarios e indicadores biológicos excepcionales. En el arte ocurre otro tanto. En orfebrería, pintura o dulcería, alhajas minuciosas, filigranas, miniaturas o golosinas sembraron las culturas de piezas altamente preciadas. Nada extraño pues que Beethoven fuera prolífico en formas diamantinas, a modo de ejercicio pausado o audaz Beethoven escribiría una constelación de piezas diversas, talladas con atinado esmero para placer de los sentidos y alimento del alma. De los tres cuadernos que Beethoven dedicara a las bagatelas, esta tolvanera del Op. 126 que Beethoven juzgaría en su carta al editor Schott como «muy elaboradas, ver probablemente las mejores que haya compuesto en este género» y publicadas en 1825 con una dedicatoria a su amado hermano Johann, ponen de manifiesto su maestría en lo pequeño como en lo grande. Comentario y dedicatoria bastarían para definirlas: precisión y hondura. No obstante, dos apreciaciones me parecen oportunas. Amén de aquella que les consagrara Romain Rolland en su libro sobre Beethoven -obra que os invito a tener como compañera de viaje-, retengo la del maestro Adorno. El nóbel francés anotó en su día : «Un supremo dominio del arte distribuye los matices con propiedad y precisión; jamás Beethoven supo dedicar tal valor al detalle […]. Si el orden de estos seis “Stimmungsbilder ” tan variados como fueran, nada fortuito, sino meditado, nos autoriza a indagar el desarrollo de una jornada del alma de Beethoven y la sucesión de sus asociaciones y sentimientos. Leemos con mayor nitidez que en las grandes obras, obedientes a su propio plan imperativo, la movilidad extrema de este espíritu, capaz se apreciar la paz más pura y sus delicias, pero cuya puerta está constantemente abierta al soplo de la inquietud». En cuanto al maestro Adorno, sin duda alguna el filósofo que mejor entendió la música contemporánea y las raíces que la precedieron, señala a propósito de estas seis bagatelas: «Insociable, el último Beethoven se niega a la música doméstica. Ante los últimos cuartetos, el aficionado a las cuerdas se queda perplejo; ante las últimas sonatas y las Variaciones Diabelli la perplejidad la siente el aficionado pianístico: al tocar y, bastante fácilmente en consecuencia, también al oír. Al paisaje petrificado no conduce ningún camino cómodo. Pero cuando Beethoven hizo hablar a la piedra sacando de ella figuras con el escoplo, al terrible golpe volaron las esquirlas. Y así como el geólogo es capaz de reconocer a partir de minúsculos fragmentos diseminados la verdadera composición de estratos enteros de tierra, así las esquirlas dan testimonio del paisaje del que proceden: los cristales son los mismos. El propio Beethoven las llamó bagatelas. No son meramente esquirlas, ni documentos del proceso productivo más potente de la música, sino que su extraña brevedad revela al mismo tiempo ese raro encogimiento y tendencia a lo anorgánico que conduce al secreto más íntimo del último Beethoven lo mismo, quizá, que de cualquier gran estilo tardío. Aunque generalmente incluidas en el conjunto de las “piezas para piano” de Beethoven, no son ni de lejos tan conocidas como las sonatas: es como si en su atmósfera se respirara con dificultad. Pero la fatigosa respiración la compensan con formidables perspectivas para la vista» .
Gracias Ixtriche
The first one contains all the metaphysical and emotional range of the second mvt of op 111, in miniature form.
Wunderschöne Interpretation dieser fein komponierten Bagatellen im gut phrasierten Tempo mit anmütigem Anschlag des Klaviers und angenehmer Dynamik. Die Tonqualität ist erstaunlich hoch als eine Aufnahme von fast achtzig Jahre vor zur Zeit des Hochladens. Alles ist ausgezeichnet!
11:49 ahhhh...
I’m confused, are these not taken from his late piano sonatas?
No, these are separate pieces. But they are from his late period.
A telescope into time.
When was this recorded? 193- ?
The notes say the 13th of January 1937.
For late Beethoven, who can approach this guy? Did he - great portrait of the Master - survive Hitler? Will we survive Trump?
Looks like we did
Trump is more useful to Western Culture as you think.