El hombre que se hartó de ser genio

Imagina tener el potencial mental más grande de la historia, pero de pronto decides abandonar todo y vivir una vida de lo más normal. Te presento a Kim Ung-yong una de las personas más inteligentes de las que se tiene registro, nació en Corea del sur el 8 de marzo de 1962 a los seis meses ya hablaba con fluidez, a los tres años hablaba japones, alemán, inglés, chino y otro tanto de idiomas más. A los ocho años se fue a los Estados Unidos a estudiar física, en su examen de IQ se mostró que tenía un coeficiente intelectual de 210 para ser un genio le hubiera bastado superar los 140 puntos. Fue promovido a un programa especial, con la finalidad de mejorar más su rendimiento, en 1974 comenzó a trabajar en la NASA, todo indicaba que su potencial estaba en su máximo esplendor, pero de pronto… Un día renuncio a todo, dijo que trabajaba como una máquina y no tenía, amigos ni tiempo para ser el mismo, volvió a corea y desapareció de la mirada pública para finalmente continuar solo como profesor en una pequeña universidad pública. Mucha gente piensa que su talento está desperdiciado, pero él esta feliz de vivir como un humano y no como una máquina.