El trágico destino de Ana Bolena

Ana Bolena, dama de compañía de Catalina de Aragón, cautivó al rey Enrique VIII, quien, enamorado, desafió al Papa para casarse con ella. A pesar de ser coronada reina, su matrimonio fue infeliz, marcada por la presión de dar un heredero varón. Tras rumores de infidelidad, Enrique ordenó su arresto y fue acusada de traición en un juicio injusto. Ana fue ejecutada el 19 de mayo de 1536, dejando un legado trágico y una hija, Isabel, que se convertiría en reina.