128. Guitarra campesina. Margarita Espinoza. El conejito
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- Опубліковано 16 вер 2024
- Margarita Espinoza
Población Pueblo Nuevo. Temuco
Región de la Araucanía
Conocí a la Sra. Margarita, a sus 82 años en 1980, a través de un colega profesor. Fue prerrequisito llevar aguardiente para que pudiera cantar. Y ello por la costumbre de las cantoras campesinas de tomar un pequeño sorbito de aguardiente entre canto y canto, para mojar la garganta. Jamás agua fría, se les puede “pasmar” la voz, cosa que les escuché a muchas cantoras que tuvieron esa imprudencia y con ello justificaban la pérdida de la voz
Su repertorio mezclaba canciones de moda de principios de siglo con algunos temas de la tradición campesina. De ella obtuve la primera versión cantada de “Una niña sentada en la playa” y tuvo la paciencia de enseñarme, paso a paso, el trinado con el que se acompaña en el finar Por Trasporte
Me incomodaba (pese a que era visita en esa casa) la continua interrupción de su hija y de sus nietos indicándole que canciones cantar, probablemente las que a ellos más les agradaban. También le hacían callar cuando empezaba a relatar cosas de su juventud… con el tiempo entendí que esos relatos probablemente ya eran muy repetitivos para la familia, aunque para mí era información relevante
Con los años he aprendido lo importante que es escuchar con autenticidad, cosa que percibe el cantor o la cantora y le motiva a continuar relatando con más confianza los hechos de su vida. Esto mismo me ha permitido generar amistades duraderas con los cultores naturales pues en mí han tenido un auditor interesado… cosa que ya no encuentran entre sus familiares, precisamente porque ya le han escuchado muchas veces sus recuerdos felices de su juventud. Hemos perdido la capacidad de escucharnos, más que con respeto, con afecto
Escuchando la guitarra de la Sra. Margarita podemos escuchar e identificar ciertos sonidos que es común encontrar en los cultores naturales y es que es bueno analizar
En primer lugar el uso “golpeado” de los bajos, muy común en las viejas guitarreras. Con el pulgar se toma la cuerda se levanta y se deja caer produciendo, en muchos casos un efecto de trasteado, un golpe más que un sonido. En este caso los sonidos que escuchamos son concordantes con las funciones armónicas que demanda la melodía
Al entrar al estribillo no existe el mismo cuidado. En el decir tradicional, se charranguea la guitarra, suena desafinada, talvez al pulsar mal las funciones armónicas y, por tanto, no siendo funcional al acorde armónico. Este modo de tocar es más bien una envoltura sonora, aportando una sonoridad similar a un pedal de carácter más tímbrico que armónico
El Conejito. Two step
Afinación Guitarra Común. Re Mayor
A la orilla de un mar
muchas perlas yo vi
y color de zafiro
y también de rubí
Una lágrima vi
por tus ojos rodar
y por eso bien mido
yo se te idolatrar
El sol que nace por la mañana
y a tu ventana viene alumbrar
ahí se vive y ahí se goza
sin más testigos que el Dios y el mar
Si quisiera llevar
célico ángel de amor
a gozar del Edén
de la brisa del mar
Allá está nuestro Edén
de su santa ilusión
allá va el corazón
a gozar del amor
El sol que nace…
Ya no quiero más sembrar
ni quiero vivir, ni quiero vivir en rancho
me voy a civilizar
con el sombrero, con el sombrero ancho
Ay mi conejito
Ay que por el me muero
Ay el listoncito
para el sombre(ro) que quiero
Ya no quiero terciopelo
ni sumarre, ni sumarre de plata
cuando te pido un beso moreno
no me lo neguéis, no me lo neguéis ingrato
Ay mi conejito…
Este “Conejito” es un tema de vieja data. Aparece en el Cancionero “Don Fausto cantando las mejores canciones de 1926” cuyo editor es Juan B. Peralta, señalando que es un Two Step
A orillas del mar
blancas perlas yo vi
de color de zafir
y también de rubí
A orillas del mar
yo te vengo a buscar
muy juntitos después
iremos a pasear
El sol que nace por la mañana
y a tu ventana vengo a cantar
aquí se vive, aquí se goza
sin más testigos que el Dios y el mar
Ay mi conejito
Ay por el me muero
Ay el listoncito
para el sombrero
Este tema lo han adoptado los Boy Scouts para animar sus jornadas de marchas y juegos, cantado a capella y con juego de palmas
La Sra. Margarita canta este “Conejito” agregando un par de estrofas que no aparecen en la versión comentada. Una de ellas:
Ya yo no quiero sembrar
ni quiero vivir en rancho
me quiero civilizar
con esos del sombrero ancho
Esta estrofa aparece en una canción mexicana recogida en 1854 y que era cantada por las tropas al marchar. “Cancionero michoacano, 1830-1940: canciones, cantos, coplas y corridos” de Álvaro Ochoa Serrano y Heron Pérez Martínez
La otra estrofa:
Ya no quiero terciopelo
ni sumarre, ni sumarre de plata
...
No le he encontrado el origen, ni tampoco lo que significa ese "sumaré"
Trabajo Investigación Raúl Díaz Acevedo y Eliana Tolosa .
Email: raul.diaz.acevedo@gmail.com
Gracias. Me encanta tiene gran fuerza.
Gracias Raúl! Un abrazo
Muy lindo el teñir de la guitarr
Que lindo ese es el legado de del campo gracias por rescatar las cantoras
Gracias Marta... y feliz día de santo atrasado-
@@rauldiazacevedo7058 saludos soy Ciro mucho gusto y¿ que santo ???
Perdón… pero aparece Marta Ulloa en tu identidad y se me olvida que bajo ese nombre esta Ciro
@@rauldiazacevedo7058 si jaja
Tremendo como suena el golpe en el bajo, como siempre muy agradecido Raúl!
Así es Sergio… en todos los tema que toco tenía esa particularidad
Muy buen trabajo sobre todo por su documentación y análisis,
Muy bueno, un abrazo
Gracias… eso es tener amigos… generosos en sus comentarios
Buenas tardes don Raúl, cuando va ud. a sacar la segunda edición de su libro guitarras campesinas, le Aria un tremendo favor a mi gente de la tercera edad para así poder tocar guitarra con mayor facilidad, respetuosamente un admirador suyo.
Antes que termine el año espero que sea una feliz realidad… lo avisaré por todas las redes cuando ocurra. Gracias José por tus palabras de aliento