CARTA AL ALZHEIMER

Quiero confesarte algo, desde la primera vez que tuve la fortuna de conocerte, supe que tu y yo no nos íbamos a llevar muy bien, ya que desde tu llegada te metiste con la persona que más he amado en toda mi vida, me engañaste de una manera muy hábil ya que lentamente te fuiste apropiándote de la mente de mi madre.
Toda mi vida me he considerado una persona altamente competitiva y que todo lo consigue con base a esfuerzo y a la dedicación, y que los imposibles no existen en mi mente, las derrotas es una palabra que no ocupo a menudo y mucho menos me rindo ante un adversario o un obstáculo peleo hasta el final hasta entregarlo todo, pero quiero decirte a ti maldito Alzheimer, que contigo acepto la derrota, me has vencido, te llevaste lo más valioso que tuve en mis manos, me dejas con noches de insomnio mirando las estrellas y llorando en el silencio, porque me arrebataste de mis manos a la mujer que dio toda su vida por mí: mi madre.