Video resumen año 2021

APRAMP es una organización que cada día trabaja con mujeres y niñas prostituidas, es decir con mujeres y niñas expuestas a una práctica que desprecia los valores de la igualdad y la reciprocidad sexual.
Trabajamos por tanto para apoyarlas a salir del perverso sistema prostitucional, y al hacerlo luchamos contra la inequidad y contra los intentos de normalizar la explotación sexual ya que esta NO cabe en el marco de las practicas sociales respetuosas con los Derechos Humanos.
Las ONGs estamos a pie de calle. Detectamos, apoyamos a la policía en la identificación y acercamiento a las víctimas, ofrecemos espacios amables y confiables, y damos respuestas concretas a las necesidades de las víctimas.
España debe dar pasos en el sentido de reconocer y habilitar a las ONGs especializadas como piezas clave de la intervención e interlocución con este tipo de víctimas a las que difícilmente podrían acceder las instituciones, sin los lazos de confianza que se consiguen a través de organizaciones como APRAMP. Eso implica establecer vínculos protocolizados entre el ministerio del interior y quienes prestamos apoyo residencial, psicológico, educativo o de apoyo a la autonomía económica de las víctimas.
Organizaciones como APRAMP somos piezas imprescindibles del proceso por que contamos con profesionales especializadas y prestamos una atención esencial que se convierte en el principal apoyo con que cuentan las instituciones para llevar a buen puerto la lucha contra este delito.
Nunca conseguiremos poner el foco en el auténtico problema político y social que enfrentamos si nuestra legislación no se sustenta en la idea de que la prostitución es una práctica social no deseable, y debemos hacerlo con la misma rotundidad que manifestamos estar en contra de la esclavitud.
La cuestión no es como vamos a castigar a quien venden mujeres, la cuestión es si una sociedad que se pretende democrática y respetuosa con los Derechos Humanos puede sostener legalmente un sistema que se basa en comercializar el cuerpo de seres humanos, sin poner el foco en quien hace la demanda, este es el problema.
Urge revertir la reforma de 2015 del Código Penal que estableció una especie de proxenetismo benévolo y no punible. El proxenetismo debe ser punible en todas sus formas al margen del sistema coactivo que establezca para cooptar y mantener a las víctimas en el ejercicio de la prostitución. Solo así se dará cumplimiento al Convenio para la represión de la trata de personas y de la explotación de la prostitución ajena ratificado por España y del que estamos descolgados de facto.
Desde APRAMP queremos recordar que el Pacto de Estado contra la violencia insta a establecer campañas de prevención destinadas a jóvenes y enfocadas a desincentivar la demanda. Ese es el camino para que se haga realidad el objetivo expresado por Lars Naumburg de que "Tenemos que darles a los jóvenes una nueva visión del mundo, un mundo donde hay un 50 por ciento de mujeres en la morada del poder y ni una sola se vende por la calle”.
Agradecemos a todas las personas, entidades, organismos e instituciones con los que hemos trabajado este año para luchar y seguir avanzando #contralatrata #niunpasoatrás #porellasyportodas