Encomiable la labor de Silvio de llevar la cultura hasta las puertas de los que no se pueden permitir el acudir a un teatro para disfrutarla. La cultura es un derecho al que a nadie se le debería restringir el acceso. Llama la atención lo heterogéneo de su público. Niños y mayores coreando al unísono: "Hay que quemar el cielo si es preciso por vivir, por cualquier hombre del mundo, por cualquier casa...". Prueba inequívoca de que la cultura une y derriba fronteras. Tal vez por eso ha habido siempre tantas reticencias en universalizarla, y tanto afán en manipular y prostituir los contenidos que se nos enseñan en las escuelas y en los medios de comunicación.
Grandioso!! ENORME 🇨🇺!
Encomiable la labor de Silvio de llevar la cultura hasta las puertas de los que no se pueden permitir el acudir a un teatro para disfrutarla. La cultura es un derecho al que a nadie se le debería restringir el acceso. Llama la atención lo heterogéneo de su público. Niños y mayores coreando al unísono: "Hay que quemar el cielo si es preciso por vivir, por cualquier hombre del mundo, por cualquier casa...". Prueba inequívoca de que la cultura une y derriba fronteras. Tal vez por eso ha habido siempre tantas reticencias en universalizarla, y tanto afán en manipular y prostituir los contenidos que se nos enseñan en las escuelas y en los medios de comunicación.