Querido Dios, te amo | Una poderosa oración diaria

Querido Dios, aquí estoy, con mi corazón expuesto ante Ti, con las palabras más sencillas y sinceras que puedo pronunciar: te amo. No porque sea digno, no porque lo entienda todo, sino porque Tu amor me encontró primero. Señor, te amo porque cuando estuve perdido, Tú me guiaste; cuando mi corazón estaba vacío, Tú lo llenaste; cuando todo parecía oscuro, Tu luz brilló en mi vida.
Padre celestial, mi amor por Ti es imperfecto, lo sé, pero aún así Tú lo aceptas, porque no buscas la perfección en mí, sino la entrega. Hoy vengo a Ti, Dios amado, como un niño que busca el abrazo de su Padre, como un corazón sediento que anhela Tu agua viva. Te amo porque me has mostrado lo que significa amar de verdad: un amor que no falla, que no se cansa, que no se detiene.
Jesús, mi Salvador, mi Redentor, al pensar en la cruz, mi corazón se llena de gratitud y amor por Ti. Tú me amaste hasta el extremo, entregaste todo para que yo pudiera conocerte y caminar contigo. ¿Cómo no amarte cuando diste Tu vida por mí? Te amo, Señor, porque en Tu sacrificio encontré la mayor expresión de amor, un amor que me llama por mi nombre y me invita a permanecer en Tu presencia.
Espíritu Santo, dulce Consolador, siento Tu presencia en este momento. Es Tu amor el que me impulsa a decir estas palabras, el que llena los vacíos de mi alma, el que enciende en mí esta llama que nunca se apaga. Te amo porque me recuerdas cada día que soy hijo de Dios, heredero de una promesa eterna, y nada puede separarme de Su amor. Ven, Espíritu Santo, y guía mi corazón para que mi amor por Dios crezca más y más, hasta que toda mi vida sea una expresión de este amor.
Mi alma proclama con fuerza: te amo. Y no porque siempre lo haya hecho bien, no porque siempre haya comprendido Tus planes, sino porque incluso en mi fragilidad, Tú nunca me dejaste. Te amo porque, aun cuando mi fe tambaleaba, Tú permanecías fiel; porque cuando mis fuerzas fallaban, Tu gracia era suficiente para sostenerme. ¿Cómo no amarte, Señor, cuando veo Tu mano obrando en cada rincón de mi vida, incluso en los momentos en que no lo merecía?
Padre celestial, te amo porque cada día me enseñas algo nuevo sobre Ti y sobre mí. Me enseñas a amarme como Tú me amas, a perdonar como Tú perdonas, a caminar en la humildad que sólo Tú puedes inspirar. Hoy quiero rendir mi corazón a Ti por completo, dejar a un lado mis propios deseos, mis miedos, mis dudas, y entregarme sin reservas. Porque mi amor por Ti no es sólo palabras, Señor, es un anhelo de que cada parte de mi ser sea transformada por Tu amor infinito.
Jesús, mi Amado, cada vez que pronuncio Tu nombre, siento cómo mi espíritu se llena de paz. No hay otro nombre bajo el cielo que me traiga esperanza, que me dé fuerzas, que me envuelva con tanto amor. Te amo porque en Tu rostro veo el rostro del Padre, porque en Tus palabras encuentro verdad, y en Tus heridas encuentro sanidad. Tú eres el amigo fiel, el pastor bueno, el amor que me sostiene cuando todo parece derrumbarse.
Espíritu Santo, ven y haz que este amor arda más fuerte en mi interior. Purifica mis intenciones, que mi amor por Dios no sea sólo de labios, sino un amor que se vea en mis actos, en mi entrega, en la manera en que vivo cada día. Dame un corazón que no sólo diga "te amo", sino que lo demuestre con cada decisión, con cada sacrificio, con cada momento de adoración. Espíritu de vida, enséñame a amar con ese amor incondicional que viene del Padre y que se perfecciona en mí a través de Ti.
Querido Dios, te amo porque me has dado una vida llena de propósito, porque me has llamado a ser Tu hijo, porque en Ti encuentro lo que nadie más puede darme: esperanza eterna, paz verdadera y un amor que nunca falla. Mi corazón late por Ti, Señor. Todo lo que soy y todo lo que tengo es para Ti, porque sin Ti no soy nada.
Querido Dios, te amo con un amor que no puedo describir por completo, pero que arde dentro de mí como un fuego eterno. Te amo porque me elegiste antes de que yo pudiera siquiera conocerte. Me viste en mi fragilidad, en mis errores, en mis momentos más oscuros, y aún así me llamaste Tuyo. Señor, mi corazón no puede contener la gratitud que siento al saber que este amor no depende de lo que yo haga, sino de quién eres Tú: fiel, constante, perfecto.
Amén.
******************************************************* Escritura relacionada: Génesis 1:1 Juan 3:16
Efesios 3: 17-19 Deuteronomio 6:5 2 Corintios5:17
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[@lilianagenart5879]

Amén mi querido Jesús tus bendiciones amén 🙏 siempre estan conmigo amén 🙏🙏🙏

[@MariaFlores-qq3ym]

Amén te amo mi Dios por siempre porque tú me amas demasiado y yo le doy gracias a tu sacrificio por mi y por mí familia tú cumples promesas mi alma te necesita y te quiere porque tengo fé en tí mi Dios y mi Padre Celestial .tú eres amor .amén 🙏