Sabías palabras, con esa ternura que tiene Carmen María, transformando lo todo, desde otra mirada y desde ese balcón, que alguna vez me regaló y donde me traslado en momentos difíciles. Cuesta llegar a aprehender para sí ésta gran fórmula de vida, no tan fácil, por eso no me canso de escucharla. Cómo siempre te digo, Gracias!!!
Sabías palabras, con esa ternura que tiene Carmen María, transformando lo todo, desde otra mirada y desde ese balcón, que alguna vez me regaló y donde me traslado en momentos difíciles. Cuesta llegar a aprehender para sí ésta gran fórmula de vida, no tan fácil, por eso no me canso de escucharla. Cómo siempre te digo, Gracias!!!
Qué maravilla