Fragmentos de Peregrinación a Luján 2024

Fragmentos de la Peregrinación a Luján.
¡Cómo picaba el sol! Durante unas cuantas horas.
A partir de la mitad del camino, no pude sostener regularmente la cámara: mis pasos doloridos se hicieron pulso de la imagen.
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Hay un par de fragmentos un poco más largos que los otros. Cuento un poco.
Ya entrando en la ciudad de Luján, sentimos venir desde atrás un violín, con melodías de las canciones clásicas a la Virgen. Cuando estás a esa altura del camino, amasado por la peregrinación, muchas cuestiones del afuera y el adentro se sienten diferente, calan más hondo. Más esas canciones que evocan algo del temprano fervor religioso. Sumale que se notaba una interpretación virtuosa... Bueno, ahí verán. Catorce años. Bajita, flaquita, chiquita. Con un poncho y sombrero como pintado. Caminaba junto a su mamá, con quien me pongo a conversar: hizo muchísimas veces la Peregrinación y por primera vez la comparte con una hija, la más chica de las cuatro, que le pidió ir. Salieron de Rodríguez. Insistió en traer el violín, para tocarle en la Catedral a la Virgen. "Y ella toca folklore, que es lo que le gusta". Así que la miro a la piba y le digo "ah pero... ¡tocate algo de folkore!". Bueno, ahí verán. Va, en realidad verán el final, porque cuando disparó las primeras línea de la Chacarera del violín, me provocó cierta conmoción y tardé un ratito en decidirme a grabar. No quería más que estar ahí. . Y, ahora sí, ahí verán, que le piden otra. Y el noreste trajo.
Le pregunté el nombre, ahí verán. Alma Luján. Y bue...
Cuando entramos a la Catedral alguito fue tocando, poco, hasta que llegamos más adelante. Resultó que haciendo la animación estaban dos jóvenes ¿sacerdotes? cantando, uno de ellos con la guitarra, y un tercer cura que... estaba ahí sentado. Lo reconozco, por teólogo, capo del cristianismo popular. Lo había visto hace poco en unas jornadas de teología. Él me juna apenas de vista, si acaso. Así que le toqué el hombro, saludé e hice una rápida presentación, propia y de mis compañeras, y le dije, que me encontré a esta piba, que trajo su violín para tocar... Bueno, ahí verán.
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Cientos de miles personas. Una experiencia y muchas experiencias. Un pueblo. Muchos. Te deja los pies y el cuerpo dolorido. Pero el corazón... "no te lo puedo explicar".
@almalujanok