La vida de nosotros - Liborina Pedro Julio Rojas González.

Don Pedro Julio Rojas tiene 81 años. Cada que alguien lo saluda, su pequeña tienda se convierte en un teatro, pues sus improvisadas narraciones parecen responder al más afinado de los libretos: sus andanzas durante la adolescencia y la juventud por complejos caminos de herradura, entre decenas de mulas y arrieros, es tan solo uno de los temas que adereza con el producto más vendido en su negocio: "el pocillao de tinto".
Hace más de cuarenta años, don Pedro Julio ha visto pasar la vida de Liborina desde el mostrador de esta tienda, que abre las puertas a las 4:00 de la mañana, la hora en que lo visitan los campesinos que inician su jornada, los viajeros que deben desplazarse a las veredas y corregimientos de Liborina, y los que salen hacia Medellín para cumplir con alguna diligencia.
Mientras sirve tintos sin parar, don Pedro Julio no hace otra cosa que hablar de la fundación de su pueblo y de otras particularidades tan "pequeñas" como el fríjol liborino, o tan imponentes como su parque principal; y todo ello, mientras declama poesías y suelta otros dichos que le ayudan a reforzar la importancia del sueño que nunca pudo cumplir: haber estudiado; el eje, según sus palabras, de cualquier inversión que vaya a hacerse en su localidad.

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Que buen video, ver el pueblo y a Don Pedro Julio me llena de alegría Saludos cordiales.