CHOCÓ - La adecuada nutrición como elemento clave para la protección infantil

Chocó es un territorio pluriétnico donde, según las proyecciones del DANE para 2022, el 74 % de su población se reconoce como afrodescendiente y el 15 % es población indígena. El 56 % de la población habita en zonas rurales, cuyas principales vías de acceso son fluviales, lo que limita el acceso a servicios de salud.
En lo que respecta a la desnutrición aguda, en 2023 se notificaron 920 casos; este es el tercer departamento con mayores prevalencias (1,59 x 100 menores de 5 años) de desnutrición a nivel nacional; el 69 % de los casos se presentan en población indígena.
La mortalidad infantil y en la niñez en Chocó es tres veces más alta que la del país; de hecho, la tasa de mortalidad por desnutrición es cinco veces mayor a la media nacional, al igual que la tasa de mortalidad por infecciones respiratorias agudas (IRA) y enfermedad diarreica aguda (EDA).
El reclutamiento, uso, utilización y violencia sexual contra niños, niñas y adolescentes tienen varios riesgos asociados, entre ellos la exclusión, pobreza, exposición a la violencia en sus familias, escuelas y comunidades, naturalización de las armas, trabajo infantil, carencia de espacios de expresión y participación, entre otros.
LA DESNUTRICIÓN AMENAZA SU PROTECCIÓN
La falta de oportunidades, opciones y alternativas de vida para los niños, niñas y adolescentes en territorios con características similares a Bagadó genera un entorno de mayor riesgo para ellos y ellas. Si se suma a este contexto la presencia y tránsito de grupos armados que controlan la vida social, económica y comunitaria del territorio, quienes les ofrecen y satisfacen algunas de sus necesidades e intereses, como reconocimiento social, acceso a recursos económicos, poder, afecto, entre otros, el riesgo de reclutamiento aumenta.
Es así que el riesgo de reclutamiento está directamente relacionado con el goce y garantía de derechos de los niños, niñas y adolescentes, y factores como la desnutrición (uno de muchos), ya que esto genera dificultades de aprendizaje en la infancia/adolescencia, aumentando las probabilidades de deserción escolar y, como consecuencia, reduciendo las oportunidades de vida. Potencialmente, a largo plazo, se podría asociar que un/a adolescente que sufrió desnutrición en sus primeros años de vida tendría mayor riesgo de vinculación a grupos armados. Sin embargo, es importante enfatizar que el riesgo de reclutamiento, uso y utilización de un niño, niña o adolescente por parte de grupos armados ilegales es la suma de varios factores estructurales, familiares, sociales, económicos y culturales, donde vulneraciones como la desnutrición serían uno más de ellos, asociado a la pobreza y exclusión.