Hay una canción que dice...."pensaba todo el tiempo en ella para no pensar en mi a cada rato, pensaba todo el tiempo en ella que ya no dejaban huellas mis zapatos".
¿Qué sentido posee la vida de cada ser humano si esta misma vida, sin importar qué se haga, está condenada a su extinción? Descendiendo aún más profundo, ¿qué sentido tiene que exista algo cuando ese mismo algo está condenado a desaparecer? ¿Cuál es el valor de estar vivo, es decir, qué cosas beneficiosas se obtienen de estar vivo? ¿Qué cosas desagradables se obtienen de estar vivo? Haciendo la síntesis de las últimas dos preguntas en un sentido más personal, ¿por qué esforzarse por mantener lo más que se pueda la vida cuando esta está condenada a desaparecer sin importar qué, sumando que esta vida no te da ningún beneficio o cuyo beneficio es puesto en gran duda, y como colmo, lo que obtienes de estar vivo son sentimientos y cosas desagradables entendidas estas como situaciones miserables en todo el amplio sentido de la palabra? ¿Cómo puede ser el sentido de la vida buscar el sentido? Si yo arrojara a un ser en un mundo hostil y utilizando demás términos cuyo fin se refiere a que este ser no pueda estar conforme con su condición, y le dijera que la razón por la cual lo creé y lo arrojé a este mundo sería para que el mismo averiguara el porqué, me parece de lo más absurdo. ¿Cuál sería la necesidad de todo ello? Nosotros, seres que habitamos este mundo, hemos sido arrojados y condenados al mismo junto con todas sus implicaciones sin saber cuál es el motivo, condenados a nuestra situación desgraciada y risible de mantenernos con vida a costa de devorar y, por ende, extinguir otras vidas. En pocas palabras, nuestra vida la debemos a los cadáveres que la sostienen, y a pesar de todo ello, tarde o temprano formaremos parte de esas pilas cadavéricas sin saber siquiera el porqué de todo este mecanismo. Esto me hace cuestionar severamente que este mundo que habitamos pueda darnos algo que nombramos como bien, ya sea el placer, la bondad, la misericordia y demás cosas que puedan entenderse con este término. ¿Entendiendo todo esto, todavía eres tan imbécil de decir que todo lo que ha hecho Dios, ese creador de todo esto, es bueno, misericordioso o bondadoso? ¿Acaso la prueba máxima de misericordia no es, en última instancia, no crear ni hacernos partícipes de nada de esto? Esto me hace pensar de manera más seria que quizá el mundo realmente esté regido por un Dios malévolo, más no indiferente, pues la indiferencia solo es una de las tantas facetas de la maldad. ¿Qué tan retorcido puede estar ese Dios para hacer posible este mundo? ¿Qué tan retorcidos estamos nosotros por mantenernos y desear fervientemente mantenernos en esta existencia? Pues como bien dice Ciroran, y esto parafraseándolo, el sufrimiento no hace más que hacernos descender al infierno y nada más. ¿Cómo podría el sufrimiento ser algo beneficioso para nosotros? Algunos dirán que nos da fortaleza, pero esta misma fortaleza es absurda, ya que solo nos hacemos fuertes para soportar aún más sufrimiento. ¿Y todo esto para qué?
Tus preguntas son válidas y Mainländer propicia respuesta a la gran mayorista de ellas. La naturaleza del mundo es malvada porque la voluntad todopoderosa y benévola que creemos tener de Dios ahora se halla impotente porque habitamos en el tiempo presente de la inmanencia. Si todo está condenando a la extinción, Minlander invita a quien sienta su llamado a llevar la vida de un Santo cuyo propósito sea el de guiar a los demás individuos el amor a la muerte. Es decir, en primera instancia podemos suicidarnos y cumpliremos con nuestra redención, en segunda, nos aplastemos del dolor ajeno y llevaremos nuestra existencia a un grado político de tal manera que nuestras fuerzas orienten a los otros a acelerar el curso de su vida
@@sunwukong6917 Jajaja, es buena respuesta. Sin embargo, como no habitamos el tiempo precosmico y amenos que en la inminencia no haya experimentado la presencia de la muerte de Dios a través de su cadaver que se despliega en la Naturaleza, en el nihilismo, no hay necesidad de creer en un Dios. No obstante, lo que la teas es muy buena respuesta y la escuela cónica podría dar una muy buena argumentación
@@danieljasso3842 te puedo hacer una pregunta? Tienes discord o alguna forma de contacto? Me gustaría hablar de filosofía con alguien y realmente no tengo conocidos que les interese este tema
Con la meditación ( nada que ver con la Nueva Era ) a veces se puede alcanzar esa sensación de emancipación a través de la nada, cuando la circunstancia lo hace posible.
Hay una canción que dice...."pensaba todo el tiempo en ella para no pensar en mi a cada rato, pensaba todo el tiempo en ella que ya no dejaban huellas mis zapatos".
¿Qué sentido posee la vida de cada ser humano si esta misma vida, sin importar qué se haga, está condenada a su extinción? Descendiendo aún más profundo, ¿qué sentido tiene que exista algo cuando ese mismo algo está condenado a desaparecer? ¿Cuál es el valor de estar vivo, es decir, qué cosas beneficiosas se obtienen de estar vivo? ¿Qué cosas desagradables se obtienen de estar vivo? Haciendo la síntesis de las últimas dos preguntas en un sentido más personal, ¿por qué esforzarse por mantener lo más que se pueda la vida cuando esta está condenada a desaparecer sin importar qué, sumando que esta vida no te da ningún beneficio o cuyo beneficio es puesto en gran duda, y como colmo, lo que obtienes de estar vivo son sentimientos y cosas desagradables entendidas estas como situaciones miserables en todo el amplio sentido de la palabra? ¿Cómo puede ser el sentido de la vida buscar el sentido? Si yo arrojara a un ser en un mundo hostil y utilizando demás términos cuyo fin se refiere a que este ser no pueda estar conforme con su condición, y le dijera que la razón por la cual lo creé y lo arrojé a este mundo sería para que el mismo averiguara el porqué, me parece de lo más absurdo. ¿Cuál sería la necesidad de todo ello?
Nosotros, seres que habitamos este mundo, hemos sido arrojados y condenados al mismo junto con todas sus implicaciones sin saber cuál es el motivo, condenados a nuestra situación desgraciada y risible de mantenernos con vida a costa de devorar y, por ende, extinguir otras vidas. En pocas palabras, nuestra vida la debemos a los cadáveres que la sostienen, y a pesar de todo ello, tarde o temprano formaremos parte de esas pilas cadavéricas sin saber siquiera el porqué de todo este mecanismo. Esto me hace cuestionar severamente que este mundo que habitamos pueda darnos algo que nombramos como bien, ya sea el placer, la bondad, la misericordia y demás cosas que puedan entenderse con este término. ¿Entendiendo todo esto, todavía eres tan imbécil de decir que todo lo que ha hecho Dios, ese creador de todo esto, es bueno, misericordioso o bondadoso? ¿Acaso la prueba máxima de misericordia no es, en última instancia, no crear ni hacernos partícipes de nada de esto? Esto me hace pensar de manera más seria que quizá el mundo realmente esté regido por un Dios malévolo, más no indiferente, pues la indiferencia solo es una de las tantas facetas de la maldad. ¿Qué tan retorcido puede estar ese Dios para hacer posible este mundo? ¿Qué tan retorcidos estamos nosotros por mantenernos y desear fervientemente mantenernos en esta existencia? Pues como bien dice Ciroran, y esto parafraseándolo, el sufrimiento no hace más que hacernos descender al infierno y nada más. ¿Cómo podría el sufrimiento ser algo beneficioso para nosotros? Algunos dirán que nos da fortaleza, pero esta misma fortaleza es absurda, ya que solo nos hacemos fuertes para soportar aún más sufrimiento. ¿Y todo esto para qué?
Tus preguntas son válidas y Mainländer propicia respuesta a la gran mayorista de ellas. La naturaleza del mundo es malvada porque la voluntad todopoderosa y benévola que creemos tener de Dios ahora se halla impotente porque habitamos en el tiempo presente de la inmanencia. Si todo está condenando a la extinción, Minlander invita a quien sienta su llamado a llevar la vida de un Santo cuyo propósito sea el de guiar a los demás individuos el amor a la muerte. Es decir, en primera instancia podemos suicidarnos y cumpliremos con nuestra redención, en segunda, nos aplastemos del dolor ajeno y llevaremos nuestra existencia a un grado político de tal manera que nuestras fuerzas orienten a los otros a acelerar el curso de su vida
Si Dios no existe ¿Quién se ríe de nosotros?
@@sunwukong6917 Jajaja, es buena respuesta. Sin embargo, como no habitamos el tiempo precosmico y amenos que en la inminencia no haya experimentado la presencia de la muerte de Dios a través de su cadaver que se despliega en la Naturaleza, en el nihilismo, no hay necesidad de creer en un Dios. No obstante, lo que la teas es muy buena respuesta y la escuela cónica podría dar una muy buena argumentación
@@danieljasso3842 te puedo hacer una pregunta? Tienes discord o alguna forma de contacto? Me gustaría hablar de filosofía con alguien y realmente no tengo conocidos que les interese este tema
@@sunwukong6917 No, no tengo Discord. Algún otro medio que prefieras? Jeje
Con la meditación ( nada que ver con la Nueva Era ) a veces se puede alcanzar esa sensación de emancipación a través de la nada, cuando la circunstancia lo hace posible.
Está hablando de la indeterminación?
El buda ya lo dijo todo es insatisfacción.
Está hablando de la indeterminación?