"...y yo también he aprehendido". Esa apertura a aprehender de todo, de todos y en todo momento, es la actitud que instrumenta aquello que Aristóteles postuló: "Todos los hombres desean, por naturaleza, saber".
No solo la muerte no es el final sino que el ser humano es salvado por Cristo y verá su rostro en la eternidad del reino de los cielos. Mas hay que recordar Lucas 13:24.
Don Javier, si se plantea la consciencia como una simple ilusión, una argucia más de la voluntad, es entendible que seamos tratados como una hormiga, pues no somos más que una hormiga... Somos piedras que creemos decidir donde vamos a caer cuando estamos sujetas a una parábola exacta
Todo esto está muy bien, pero una experiencia con la muerte es especial más que nada porque a todos nos han endulzado tanto la vida que ignoramos que nos va a suceder. Hace poco un filósofo (que no diré el nombre) perdió a su hijo ante sus ojos y comprendió que todo lo que dijo antes sobre la muerte le pareció ridículo.
¿Por qué este tipo de programas se sepulta en horarios poco favorecedores para la audiencia? Si fuese a la inversa y se emitiesen en el tan cacareado "prime time" viviríamos mucho mejor.
"...y yo también he aprehendido". Esa apertura a aprehender de todo, de todos y en todo momento, es la actitud que instrumenta aquello que Aristóteles postuló: "Todos los hombres desean, por naturaleza, saber".
Me quedo con lo ultimo que ha dicho.
Saber que estas aqui y que formas parte del ciclo de la vida.
No solo la muerte no es el final sino que el ser humano es salvado por Cristo y verá su rostro en la eternidad del reino de los cielos. Mas hay que recordar Lucas 13:24.
Don Javier, si se plantea la consciencia como una simple ilusión, una argucia más de la voluntad, es entendible que seamos tratados como una hormiga, pues no somos más que una hormiga... Somos piedras que creemos decidir donde vamos a caer cuando estamos sujetas a una parábola exacta
Genial.
Todo esto está muy bien, pero una experiencia con la muerte es especial más que nada porque a todos nos han endulzado tanto la vida que ignoramos que nos va a suceder. Hace poco un filósofo (que no diré el nombre) perdió a su hijo ante sus ojos y comprendió que todo lo que dijo antes sobre la muerte le pareció ridículo.
Aquiles Esquivel Madrazo
Qué bueno cuando habla del humor y la muerte
¿Por qué este tipo de programas se sepulta en horarios poco favorecedores para la audiencia? Si fuese a la inversa y se emitiesen en el tan cacareado "prime time" viviríamos mucho mejor.