Es un cortometraje muy real, sin adornos, sin pretender que quede bonito o estético. La observación y comentarios de la hijita, acompañada de toda esa actividad desenfrenada, hacen de una cosa ordinaria, algo extraordinario que todas las mujeres hacen diariamente, sobre todo las mamás. Y esa forma de vivir, es la que aún tienen muchas mujeres y la que prevalecerá en las demás generaciones si no somos capaces de adquirir la conciencia de igualdad desde la cuna. Cuando se instaure una educación adecuada e igualitaria para niños y niñas, comenzaremos a entrar en otro paradigma.
Es un cortometraje muy real, sin adornos, sin pretender que quede bonito o estético. La observación y comentarios de la hijita, acompañada de toda esa actividad desenfrenada, hacen de una cosa ordinaria, algo extraordinario que todas las mujeres hacen diariamente, sobre todo las mamás. Y esa forma de vivir, es la que aún tienen muchas mujeres y la que prevalecerá en las demás generaciones si no somos capaces de adquirir la conciencia de igualdad desde la cuna.
Cuando se instaure una educación adecuada e igualitaria para niños y niñas, comenzaremos a entrar en otro paradigma.
Muchisimas gracias por tus palabras .