¿Por qué los bancos cobran comisiones?

Los bancos, como cualquier proveedor, cobran por los servicios que ofrecen a sus clientes: administrar una cuenta, emitir una tarjeta de crédito o realizar una transferencia entre cuentas. Este pago recibe el nombre de comisión, y es importante para mantener y mejorar los servicios que prestan los bancos: ayuda a pagar al personal que atiende al cliente, las infraestructuras tecnológicas o financiar las inversiones necesarias para la seguridad de la operativa bancaria.
La banca española cobra sus comisiones por debajo de la media europea y cada entidad puede fijar la cantidad que estime según determinados criterios, basados en su negocio o estrategia comercial, haciendo de la banca de nuestro país una de las más competitivas y permitiendo a los clientes elegir según el mejor servicio y precio que consideren.
Como explica nuestro portavoz, Alberto Aza, en este vídeo “todos los sectores de la economía cobran por los servicios que prestan: cuotas, tasas, honorarios o, en este caso, comisiones; teniendo el cliente la posibilidad de elegir lo que mejor le convenga".