La mente humana, una máquina de decisiones

Conversación
Maestría en Estudios del Comportamiento
Moderador: Juan Daniel Mazo, jefe del programa
Invitado: Carlos Andrés Naranjo Sierra, psicólogo, magíster en Economía Aplicada, Universidad EAFIT, Director de C3
Miércoles, 12 de junio de 2024. Hora: 5:00 p.m.

[@nataliarestrepo8054]

Excelente Eafit, te amo mucho.

[@labsanta]

Recap:
La toma de decisiones humanas está influenciada por sesgos cognitivos y heurísticas moldeadas por presiones evolutivas, que a menudo conducen a errores sistemáticos pero son cruciales para la supervivencia en un entorno complejo.
Principales Argumentos
Influencia Evolutiva en la Toma de Decisiones:
La cognición humana ha evolucionado para tomar decisiones rápidas y satisfactorias en lugar de decisiones óptimas debido a las necesidades de supervivencia de los primeros humanos.
Este "software primitivo" nos permite tomar decisiones rápidas, cruciales en entornos donde la deliberación lenta podría ser fatal (por ejemplo, diferenciar un depredador de una no amenaza).
Heurísticas y Sesgos Cognitivos:
Las heurísticas son atajos mentales que simplifican la toma de decisiones pero pueden llevar a sesgos.
Ejemplos incluyen la heurística de disponibilidad, donde las decisiones se ven influenciadas por información reciente o memorable, y la heurística de representatividad, donde las personas juzgan probabilidades basándose en la similitud entre eventos.
Estos sesgos, como la aversión a la pérdida (la tendencia a preferir evitar pérdidas sobre adquirir ganancias), son sistemáticos y predecibles, lo que permite integrarlos en modelos económicos.
Racionalidad Limitada:
Propuesto por Herbert Simon, el concepto sugiere que los humanos no tienen la capacidad cognitiva ni el tiempo para tomar decisiones perfectamente racionales.
Las decisiones se toman con información limitada, recursos cognitivos limitados y tiempo limitado, conduciendo a una "racionalidad acotada."
Integración en la Economía del Comportamiento:
Economistas como Daniel Kahneman y Amos Tversky integraron ideas psicológicas en la teoría económica, desafiando la noción del Homo economicus (el ser humano racional).
Introdujeron modelos que tienen en cuenta errores sistemáticos en el juicio, como la Teoría de la Perspectiva, que describe cómo las personas evalúan las posibles pérdidas y ganancias.
Contraargumentos
Heurísticas Beneficiosas:
Gerd Gigerenzer argumenta que las heurísticas a menudo conducen a resultados exitosos y son esenciales para una toma de decisiones efectiva en situaciones del mundo real.
Las heurísticas pueden ser adaptativas, ayudando a los individuos a tomar decisiones de manera eficiente sin requerir amplios recursos cognitivos.
Modelos de Toma de Decisiones Racionales:
Los modelos económicos tradicionales asumen un comportamiento racional y pueden no considerar completamente los matices de la toma de decisiones humana.
Los críticos argumentan que, a pesar de los sesgos, las personas a menudo pueden tomar decisiones racionales mediante la educación y la mejora de los procesos de toma de decisiones.
Racionalidad Ecológica:
Leda Cosmides y John Tooby proponen el concepto de racionalidad ecológica, sugiriendo que lo que parece irracional en un entorno de laboratorio puede ser racional en un contexto evolutivo.
Las decisiones que parecen subóptimas pueden ser respuestas adaptativas a presiones ambientales específicas.
"Para pensar con claridad, también es necesario olvidar, generalizar, abstraer." - La Máquina Humana
Conclusión
La complejidad de la cognición humana, influenciada por adaptaciones evolutivas y resultando en heurísticas y sesgos que moldean nuestra toma de decisiones. Comprender estos factores conecta la psicología con la economía, ofreciendo una perspectiva más rica sobre el comportamiento humano y sus implicaciones en diversos campos.