Lunes 11 de noviembre de 2024 *Coronilla a la Divina Misericordia* *En el nombre del Padre del Hijo y del Espíritu Santo* Padre Nuestro, que estas en el cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu Reino; hágase tu voluntad así en la tierra como en el cielo. Dios te salve María, llena eres de gracia, el Señor es contigo, bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Creo en Dios Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra. Creo en Jesucristo, su único Hijo, Nuestro Señor, que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo. Nació de Santa María Virgen, padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue crucificado, muerto y sepultado. Descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos, subió a los cielos y está sentado a la derecha de Dios, Padre Todopoderoso, y desde allí va a venir a juzgar a vivos y muertos. Creo en el Espíritu Santo, la Santa Iglesia Católica, la comunión de los santos, el perdón de los pecados, la resurrección de la carne y la vida eterna. *Amén* Señor de la Divina Misericordia que hoy cada uno de nosotros coloquemos nuestros nombre y de acuerdo a la primera lectura (Tito 1,1-9) también como siervos de Dios y apóstoles tuyos podamos ayudar a conducir a todos tus elegidos a la fe y al conocimiento de la verdadera piedad. Que en este día en que oramos por todas las almas del purgatorio y por todos los agonizantes podamos a través de la Coronilla ayudar a dar consuelo y alivio a todas las personas que se han alejado de la oración, que están sumergidas en la nostalgia y tristeza que conlleva la pérdida de un ser querido. Te pedimos Señor Jesús que aplaques su dolor y sufrimiento y les des la esperanza de la vida eterna, no solo para sus familiares sino también para cada uno de nosotros que aun no hemos sido llamados. Yo …. Verdadero hijo de Dios en nuestra fe común les deseo la gracias y la paz que proceden de Nuestro Padre Celestial, de Nuestro Señor de la Divina Misericordia y del Espíritu Santo, que nosotros seamos administradores irreprochables, que no caigamos en la arrogancia, que no seamos coléricos, bebedores, ofensivos, agresivos con nuestras respuestas con nuestros actos, en nuestros diálogos, que no busquemos de ganancias deshonestas, por lo contrario Santísima Trinidad que cada uno de nosotros seamos personas hospitalarias es decir seamos caritativos, misericordiosos, justos, moderados, dueños de si, firmes y adheridos a tus enseñanzas ciertas, las que están conforme a la norma de la fe, para que mostremos el fervor de orientar en la sana doctrina como de refutar a los que la contradicen. Que no caigamos en la provocación de escándalos que quitemos de nuestro vocabulario las frases: “Bueno, total, qué más da…” “todo está permitido…”, “todo vale…”, “mientras a mí no me toque…”, creando así una cultura de permisividad, del relativismo moral. *Amén* *Primera Decena* Padre Eterno, Te ofrezco el Cuerpo y la Sangre, el Alma y la Divinidad de Tu Amadísimo Hijo, Nuestro Señor Jesucristo, como propiciación de nuestros pecados y los del mundo entero. Por Su dolorosa Pasión… Ten misericordia de nosotros y del mundo entero Al terminar las cinco decenas decimos tres (3) veces: *Santo Dios, Santo Fuerte, Santo Inmortal* *Ten piedad de nosotros y del mundo entero* Dales Señor el descanso eterno… Brilla para ella la luz perpetua. Padre eterno, yo te ofrezco la preciosísima Sangre de tu Divino Hijo Jesús, en unión con las misas celebradas hoy día a través del mundo por todas las Benditas animas del purgatorio, por todos los pecadores del mundo. Por los pecadores en la iglesia universal, por aquellos en mi propia casa y dentro de mi familia. Que el alma de todos los fieles difuntos por la misericordia de Dios descansen en paz… Que así sea. Expiraste, Jesús, pero la fuente de vida brotó para las almas y el mar de misericordia se abrió para el mundo entero. Oh fuente de vida, insondable Misericordia Divina, abarca al mundo entero y derrámate sobre nosotros. *Por la Señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos, Señor Dios Nuestro* *En el nombre del Padre del Hijo y del Espíritu Santo* *Amén*
Lunes 11 de noviembre de 2024 *Coronilla a la Divina Misericordia*
*En el nombre del Padre del Hijo y del Espíritu Santo*
Padre Nuestro, que estas en el cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu Reino; hágase tu voluntad así en la tierra como en el cielo.
Dios te salve María, llena eres de gracia, el Señor es contigo, bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús.
Creo en Dios Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra.
Creo en Jesucristo, su único Hijo, Nuestro Señor, que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo.
Nació de Santa María Virgen, padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue crucificado, muerto y sepultado.
Descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos, subió a los cielos y está sentado a la derecha de Dios, Padre Todopoderoso, y desde allí va a venir a juzgar a vivos y muertos.
Creo en el Espíritu Santo, la Santa Iglesia Católica, la comunión de los santos, el perdón de los pecados, la resurrección de la carne y la vida eterna.
*Amén*
Señor de la Divina Misericordia que hoy cada uno de nosotros coloquemos nuestros nombre y de acuerdo a la primera lectura (Tito 1,1-9) también como siervos de Dios y apóstoles tuyos podamos ayudar a conducir a todos tus elegidos a la fe y al conocimiento de la verdadera piedad. Que en este día en que oramos por todas las almas del purgatorio y por todos los agonizantes podamos a través de la Coronilla ayudar a dar consuelo y alivio a todas las personas que se han alejado de la oración, que están sumergidas en la nostalgia y tristeza que conlleva la pérdida de un ser querido. Te pedimos Señor Jesús que aplaques su dolor y sufrimiento y les des la esperanza de la vida eterna, no solo para sus familiares sino también para cada uno de nosotros que aun no hemos sido llamados.
Yo …. Verdadero hijo de Dios en nuestra fe común les deseo la gracias y la paz que proceden de Nuestro Padre Celestial, de Nuestro Señor de la Divina Misericordia y del Espíritu Santo, que nosotros seamos administradores irreprochables, que no caigamos en la arrogancia, que no seamos coléricos, bebedores, ofensivos, agresivos con nuestras respuestas con nuestros actos, en nuestros diálogos, que no busquemos de ganancias deshonestas, por lo contrario Santísima Trinidad que cada uno de nosotros seamos personas hospitalarias es decir seamos caritativos, misericordiosos, justos, moderados, dueños de si, firmes y adheridos a tus enseñanzas ciertas, las que están conforme a la norma de la fe, para que mostremos el fervor de orientar en la sana doctrina como de refutar a los que la contradicen. Que no caigamos en la provocación de escándalos que quitemos de nuestro vocabulario las frases: “Bueno, total, qué más da…” “todo está permitido…”, “todo vale…”, “mientras a mí no me toque…”, creando así una cultura de permisividad, del relativismo moral.
*Amén*
*Primera Decena*
Padre Eterno, Te ofrezco el Cuerpo y la Sangre, el Alma y la Divinidad de Tu Amadísimo Hijo, Nuestro Señor Jesucristo, como propiciación de nuestros pecados y los del mundo entero.
Por Su dolorosa Pasión…
Ten misericordia de nosotros y del mundo entero
Al terminar las cinco decenas decimos tres (3) veces:
*Santo Dios, Santo Fuerte, Santo Inmortal*
*Ten piedad de nosotros y del mundo entero*
Dales Señor el descanso eterno…
Brilla para ella la luz perpetua.
Padre eterno, yo te ofrezco la preciosísima Sangre de tu Divino Hijo Jesús, en unión con las misas celebradas hoy día a través del mundo por todas las Benditas animas del purgatorio, por todos los pecadores del mundo. Por los pecadores en la iglesia universal, por aquellos en mi propia casa y dentro de mi familia.
Que el alma de todos los fieles difuntos por la misericordia de Dios descansen en paz…
Que así sea.
Expiraste, Jesús, pero la fuente de vida brotó para las almas y el mar de misericordia se abrió para el mundo entero. Oh fuente de vida, insondable Misericordia Divina, abarca al mundo entero y derrámate sobre nosotros.
*Por la Señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos, Señor Dios Nuestro*
*En el nombre del Padre del Hijo y del Espíritu Santo*
*Amén*