"No esperes más" Comparsa "Llámame Jesús". Pasodoble 2 Cuartos de Final.
Вставка
- Опубліковано 5 тра 2012
- Pasodoble de la Comparsa de los Majaras "Llámame Jesús" en su pase de Cuartos de Final. Visita nuestro blog www.letrasdelcarnavaldecadiz.blogspot.com
Que gozada!
Madre mia, que no me canso de escucharlo...
Impresionante, sin palabras...
No esperes más,
no sigas en la puerta,
que aquí tienes tu casa,
no sé si lo recuerdas;
ven, no esperes más,
y que entre tu familia,
qué guapa tu esposa,
qué guapas están las niñas.
Yo he cuidado de tu vida
desde que estabas dentro de mi vientre,
cuando dabas sólo pataditas
y conté los meses para verte.
Yo protegí a ese niño que crecía
hasta aquel día en que tú te casaste
y formaste una nueva familia
pero a tu madre casi la olvidaste.
¿Qué te pudo pasar
que se iban las semanas
sin una llamada: cómo estás mamá?
Hoy vuelves sin trabajo,
buscando sólo un techo
y un plato de comida...
No, nada me digas,
dame sólo un beso.
A veces hasta me alegra
que le vida te aprieta
si con esto consigo
abrazarte, hijo,
y poder ver a mis nietas.
Entrad, que para el hijo pródigo
que vuelve a casa está la mesa puesta,
que toíto lo que yo he llorao
ya lo he olvidao
cuando llamaste a la puerta
exelente pasadoble q llega al alma
madre mia, que letra. espectacular
Arte puro!!
que cosa mas bonita
muchisimo mejor que la serennissima de Juan Carlos, pero vamos, de calle. Esta es la que se merecia un 2º premio. Pero el jurado es asi. Una peaso comparsa
No esperes más,
no sigas en la puerta,
que aquí tienes tu casa,
no sé si lo recuerdas;
ven, no esperes más,
y que entre tu familia,
qué guapa tu esposa,
qué guapas están las niñas.
Yo he cuidado de tu vida
desde que estabas dentro de mi vientre,
cuando dabas sólo pataditas
y conté los meses para verte.
Yo protegí a ese niño que crecía
hasta aquel día en que tú te casaste
y formaste una nueva familia
pero a tu madre casi la olvidaste.
¿Qué te pudo pasar
que se iban las semanas
sin una llamada: cómo estás mamá?
Hoy vuelves sin trabajo,
buscando sólo un techo
y un plato de comida...
No, nada me digas,
dame sólo un beso.
A veces hasta me alegra
que le vida te aprieta
si con esto consigo
abrazarte, hijo,
y poder ver a mis nietas.
Entrad, que para el hijo pródigo
que vuelve a casa está la mesa puesta,
que toíto lo que yo he llorao
ya lo he olvidao
cuando llamaste a la puerta