Las confesiones de un pequeño filósofo - Azorín (Audiolibro)
Вставка
- Опубліковано 24 жов 2021
- Audiolibro narrado por Jesús Polvorinos. ¡Suscríbete para más contenido!
Nuestra web: audioclasicos.com
En el verano de 1903, a los diez años de carrera literaria, José Martínez Ruiz aprovecha una estancia en la tierra natal para componer este libro. Tras un período de ausencia, que fue tiempo de lucha nada fácil, ahora, cuando el propio e intransferible camino vocacional comienza a ser andado con paso firme y seguro, el escritor gusta de inclinarse sobre su pasado para, amorosamente, revivirlo. El contacto de nuevo con gentes y cosas que le dejaron huella en su infancia le invita, le fuerza casi, a la rememoración. Día a día, en una casa sita en el Collado de Salinas, al pie de un monte «poblado de pinos olorosos y de hierbajos ratizos», fueron saliendo estos breves cuadros, estas deliciosas páginas evocadoras.
Monóvar y Yecla -más este último- son los lugares donde sucede la acción de Las confesiones… : el colegio de los padres escolapios y las casas familiares del protagonista -la paterna, la de algunos tíos- fueron antaño sus moradas. En sobrios y significativos trazos conocemos a las personas con las que más hubo de tratar; las hay gratas y menos gratas, pero nunca el autor tiene un instante siquiera de ensañamiento; tampoco los sucesos nefastos o los parajes que pudieron resultarle hostiles promueven su irritación. Es tan delicado el recuerdo porque quien evoca está deliciosamente sumido en el pretérito, poseído por una melancólica impregnación de tristeza: la que produce el paso irreparable del tiempo.
En todo momento la expresión resulta eficaz, como plegándose cariñosamente a un contenido entrañable: efectos de ternura, de suave tristeza, de leve misterio, se dicen sobria y bellamente, con arte magistral; otro tanto sucede con la emoción honda pero nunca estridente, como soterrada y, no obstante, bien perceptible, que produce el irreparable paso del tiempo, tema clave desde ahora en la obra azoriniana. (JOSÉ MARÍA MARTÍNEZ CACHERO)
Algunas opiniones
«Sospechaba que sí, pero después de leer a Azorín no hay duda, las cosas, hasta la más diminutas, tienen alma. El pequeño filósofo del título de este libro es Azorín de niño, cuando estudiaba bachillerato en el Colegio de los Escolapios de Yecla (Murcia), allí estuvo interno toda su infancia, desde los siete hasta los quince años. No le gustaba el colegio, no le gustaba Yecla, que era el pueblo de su padre, ni los frailes escolapios que le daban clase, a excepción de su admirado padre Lasalde.
Escribió aquellos ¿recuerdos? cuando ya tenía 31 años, en 1904 y era periodista en Madrid.
Este es un libro diferente, poético, delicado, íntimo, pleno de sensiblidad. Asombra su capacidad de contemplación, la delicada ironía, y la recuperación intacta, sea recuerdo o no, de la temperatura de su yo infantil.
Era un niño ensimismado, lector apasionado y sensible que se siente arrollado muchas veces por el mundo real del colegio.
Lo recuerda todo de aquellos días en el Colegio de los Escolapios: las luces del cielo, las más pequeñas peculiaridades de los frailes y, desde luego, lo mal que lo pasaba en otras ocasiones.
Todo contado con una ingenuidad y una eficacia poética que convierten a este libro en una joya exquisita dentro de la obra de Azorín». (María José Rodulfo, ‘No sólo técnica’, Blog de animación a la lectura de la Universidad Politécnica de Madrid) (12 de septiembre de 2013)
«Solo allí, (en Monovar y Yecla) contemplando la luz de esos territorios del interior de Alicante y Murcia y escuchando hablar a la gente que vive en ellos, es posible entender la luminosidad de su estilo, la precisión de un lenguaje y de unas observaciones que de tan esenciales se vuelven etéreas. Como su autor.» (Julio Llamazares, El País, 7 oct. 2017)
Diseño de portada: Guillermo P. Guillot
Una gran obra de la literatura hispánica pero, aun mejor, la lectura que le han dado. Simplemente maravilloso.
Es un placer inmenso poder escuchar estas lecturas tan hermosas y tan bien declamadas. Me encanta. Gracias.
Tengo que decir otra vez gracias. Le escuché en Viaje a la Alcarria y como éste de Azorín , una vez comenzado a escucharle, nos engancha hasta terminar el libro.
Es usted un profesor que nos hace recordar nuestras lecturas de jóvenes estudiantes . Antes de escuchar la lectura de un libro , muro si es usted Sr. Polvorinos quien lo lee. No me agradan las lecturas de robots sin alma. Cuando oigo la primera frase , corto y cambio y le busco a usted.
Hace usted una gran labor profesoral .🙏👍👄
Perdón por el lapsus litterae o tecla con 👄. Era 🙏👍✈️
Como siempre una perfecta lectura : Causa placer escuchar su voz con sus silencios y pausas en momentos necesarios de la lectura. .
Nos hace revivir nuestra adolescencia en el instituto leyendo a estos escritores del 98. Gracias muchas 🙏👍✈️
Cuando uno a andado en esta vida es grato recordar los momentos felises del nuestro pasado.los felises.
Muchas gracias
Mil gracias!
Uff me encantael contenido
Gracias, gracias y gracias. Ya tengo esta noche sesión contigo.👍
Exelente narracin.😀
Es un auténtico regalo
No existe “pequeño” filósofo
Por eso me atrae y lo estoy escuchando!
Y muy interesante!
Seguir escuchando
Muchas gracias, excelente lectura! Todas las lecturas por parte suya son encantadoras!
Belleza!
Qué riqueza de vocabulario, Azorín !
Y el lector? Más que super!: comprende lo que lee y transmite emociones.
Muchas gracias por su trabajo, Jesús!
Lo saludo desde Buenos Aires.😊
Estos escritores clásicos, son un legado de sabiduría. Cracias por este hermosa obra.
Es como comer chocolate en trocitos pequeños GRACIAS
Hola!! Insisto en mi comentario de más abajo. Le doy un repaso a este precioso libro de Azorin, que me encanta. Gracias y.. buenas noches. 🤗 🌹
Gracias 😊
El gran azorin
Maravilloso.
Una gran narración, como siempre. Una buena prosa pero que no despierta la más mínima emoción. Al llegar a "las puertas" he dejado de escuchar el audiolibro. Muchísimas gracias.
Gracia a ti Joana; es verdad que Azorín es un autor "frío"; no hay, aparentemente, emoción en lo que cuenta (aunque yo sí la percibo). En cualquier caso, lo hace con una prosa de una gran belleza.
@ Muchas gracias por tu respuesta y por tu preocupación por la cultura.
55:32
Se están prodigando buenos lectores, pero como vd. Nadie🌹
Gracias, siempre, Mar
@ Las que Vd. tiene, señor mío!!!
No es canción. Es una obra instrumental. Se dice canción a texto y música.