Triple salto de los Colachos de Castrillo de Murcia 2019 en Burgos

EL COLACHO
Realmente , el Colacho , en esta historia es el malo de la película , y quien más atrae las miradas, quizás por su rico colorido. Representa el mal, que no está dispuesto a perder; y por contra, el Bien , representado en el Cristo que se hace carne o pan para todos, es su contrincante que finalmente obtiene la victoria.
Después de haber "triunfado" el Colacho, o creerlo, en la iglesia , durante los cantos en latín de los cofrades, dirigidos por el Abad mayor; el Colacho sale triunfante a seguir haciendo de las suyas. Es el inicio de la procesión.
Siempre sigue el mismo protocolo. La comitiva, precedida por el Colacho que toca terrañuelas, y al ritmo del Atabalero, que cierra la marcha, caminan en silencio, en dos filas, el Abad, los Amos y el Secretario.
Ya todo está dispuesto . Las calles engalanadas con colchas en las ventanas y balcones, altares adornados de flores y motivos religiosos. El público , espectador de la farsa , apostado en ese escenario , dispuesto a ver y disfrutar en calles y plazas. Y colchones donde descansan los niños que van a ser bendecidos esperan esa especial batalla. Hay dos colachos en la procesión, el del año, y el que le va a sustituir al siguiente . Y los dos gozan saltando sobre los colchones de los niños.
La procesión la encabeza uno de los Colachos, al que siguen los cuatro grandes estandartes de la Cofradía, los devotos con velas encendidas, los Danzantes que no paran en su ritmo, los niños de comunión, la Junta de la Cofradía con sus capas, el
Atabalero, las autoridades y, cerrando la procesión, la Custodia bajo palio. El otro Colacho se inserta dentro de las filas, moviéndose arriba y abajo.
En definitiva , se volvió a cumplir la tradición pues tras el triple salto de los Colachos ,en este caso, los niños fueron bendecidos por la Custodia del Santo Cristo que es el protagonista bueno en esta historia. El mal, representado por el diablo Colacho , es vencido por el Bien que es Cristo Salvador. Triunfó la bondad sobre la soberbia y la maldad, un año más, para dar fe de esta tradición ancestral de raíces grecolatinas. Se cree que el origen del Colacho procede de los mimos que se interpretaban en época romana y se impulsaron con los pueblos germánicos a pesar de las condenas del cristianismo .
El pueblo no se resistió a dejar de representar los mimos, y la Iglesia, finalmente, lo tuvo que incluir dentro de la liturgia para que ésta cobrase más autenticidad al pervivir y permitir algo tan arraigado en el pueblo.
Mediante la Bula Papal " Dominus Noster Jesus Christus" se fundamenta la Cofradía de Minerva que nace para el culto a Cristo en la Eucaristía en 1520. Y en tiempos del papa Paulo III, en 1539, ya se hizo oficial y bendecida por la Santa Madre Iglesia.
La constancia de un pueblo , asentado fuertemente en sus raíces, lo consiguió.
La fiesta , tras la Procesión no ha acabado. Todos se reúnen en las Eras de San Juan , con aspecto de foro romano, a ver una buena actuación de danzas, en este caso, "Estampas Burgalesas" tras el discurso de despedida del Atabalaro, director de la farsa que dirige a las autoridades, cofrades y público asistente.
Como premio a la devoción se ofrece a todos ,en general , una colación de pan , queso y buen vino.
Un año más, la tradición se ha representado a la manera de farsa.