Evangelio de hoy viernes 10 de enero del 2025 Lucas
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- Опубліковано 7 лют 2025
- Viernes después de Epifanía
Lectionary: 216
Primera Lectura
1 Juan 5, 5-13
Queridos hijos: ¿Quién es el que vence al mundo? Sólo el que cree que Jesús es el Hijo de Dios. Jesucristo es el que vino por medio del agua y de la sangre; él vino, no sólo con agua, sino con agua y con sangre. Y el Espíritu es el que da testimonio, porque el Espíritu es la verdad. Así pues, los testigos son tres: el Espíritu, el agua y la sangre. Y los tres están de acuerdo.
Si aceptamos el testimonio de los hombres, el testimonio de Dios vale mucho más y ese testimonio es el que Dios ha dado de su Hijo.
El que cree en el Hijo de Dios tiene en sí ese testimonio. El que no le cree a Dios, hace de él un mentiroso, porque no cree en el testimonio que Dios ha dado de su Hijo. Y el testimonio es éste: que Dios nos ha dado la vida eterna y esa vida está en su Hijo. Quien tiene al Hijo, tiene la vida; quien no tiene al Hijo, no tiene la vida.
A ustedes, los que creen en el nombre del Hijo de Dios, les he escrito estas cosas para que sepan que tienen la vida eterna.
Salmo Responsorial
Salmo 147, 12-13. 14-15. 19-20
R.(12a) Demos gracias y alabemos al Señor.
Glorifica al Señor, Jerusalén;
a Dios ríndele honores, Israel.
El refuerza el cerrojo de tus puertas
y bendice a tus hijos en tu casa. R.
R. Demos gracias y alabemos al Señor.
El mantiene la paz en tus fronteras,
con su trigo mejor sacia tu hambre.
El envía a la tierra su mensaje
y su palabra corre velozmente. R.
R. Demos gracias y alabemos al Señor.
Le muestra a Jacob su pensamiento,
sus normas y designios a Israel.
No ha hecho nada igual con ningún pueblo,
ni le ha confiado a otros sus proyectos. R.
R. Demos gracias y alabemos al Señor.
Aclamación antes del Evangelio
Mateo 4, 23
R. Aleluya, aleluya.
Predicaba Jesús la buena nueva del Reino
y sanaba toda enfermedad en el pueblo.
R. Aleluya.
Evangelio
Lucas 5, 12-16
En aquel tiempo, estando Jesús en un poblado, llegó un leproso, y al ver a Jesús, se postró rostro en tierra, diciendo: “Señor, si quieres, puedes curarme”. Jesús extendió la mano y lo tocó, diciendo: “Quiero. Queda limpio”. Y al momento desapareció la lepra. Entonces Jesús le ordenó que no lo dijera a nadie y añadió: “Ve, preséntate al sacerdote y ofrece por tu purificación lo que Moisés prescribió. Eso les servirá de testimonio”.
Y su fama se extendía más y más. Las muchedumbres acudían a oírlo y a ser curados de sus enfermedades. Pero Jesús se retiraba a lugares solitarios para orar.
Amén 😇
HERMANO Alejo Dios lo bendiga y el espíritu santo le siga dando sabiduría para que ud nos pueda compartir la palabra de Dios fíjese que hace 8 días que estuvimos en retiro de servidores viví algo muy bonito se acuerda que me diagnosticaron 2 tumores en glandulas salivales ala derecha y el viernes anterior me icieron una biopsia y para gloria de Dios salio negativo al cáncer yo tenia fe En Dios que no era cáncer que Dios me estaba protegiendo y estoy feliz en la presencia de Dios porque el nunca nos a dejado solos y ese sábado el hermano José Garcia impuso sus manos sobre mis tumores y oro y le dijo a mi Dios queremos tu voluntad para la sanación no la voluntad de ella ni la mía es la tuya Dios todo poderoso y yo estaba sometida y sigo sometida a la voluntad de Dios y usted me dijo que no perdiea la fe que yo estaría bien porque para Dios no hay nada imposible y el tema de este ebangelio me tococo mucho porque así como ese leproso le dije yo a Jesús en su altar senor si tu quiere tu me puedes sanar porque tuyo es la gloria y el poder por siempre y Dios me escucho poreso glorificado y alabado sea mi Dios todo poderoso mi amado por siempre amen