Si hay alguien que sabe homenajear a sus amigos y compañeros son vos Sr. Andres Calamaro. Este tema y el que le hiciste a Miguel Abuelo es excepcional.
me gusta mucho este album ,creo que es el mejor de esta decada o al menos de este tiempo ,y los antiguos en su epoca con himnos ya conocidos es mi favorito
Andrés Calamaro un fuera de serie artista cómo los que ya no hay la cultura agoniza y acá llenan estadios sólo para ver 22 tipos correr detrás de una pelota.Una sin razón no olvidemos que somos que crucifica a sus ídolos por caso Diego Armando Maradona y lista sigue me quedó el sabor de la escucha de BOHEMIO DE UN BOHEMIO
@@nahup944 Andrés participó en el disco "privé" de Spinetta y en alguno más tamb, ahora no lo recuerdo. Se debían llevar bien nose si hablarian seguido pero se respetaban mucho, hay un fragmento de Calamaro diciendo algo como "Creo que a Spinetta no le gustan mucho mis discos porque los nombra poco, pero a mi me gusta todo lo que hace Spinetta..."
Una carta desesperada y veinte mil polentas con salchichas Tengo estos papeles como ideas desbordadas que, desde algún lugar mío e insospechado, flotan sobre mi cabeza… Arrojadas, desteñidas pero luminosas. Darían tantas respuestas como preguntas hay. Pero que por sobrevolarme, mujer, nunca serán capaces de responder, de responderme, de acaso responderte, cariño. Alzo las manos como queriendo atrapar lo que no se resuelve, el problema inexorable, implacable, moneditas que se caen o como campanas que suenan a deshoras. Y el lenguaje siempre vulgar y tonto, vasto, sí, pero vulgar, demasiado prolijo y harto inefable para lograr decir lo que me pasa por entre las cejas, el corazón, entre estos herrajes contra la libertad. El amor. Cómo describir eso que me sostiene entre estas paredes. Con qué pájaros, con qué papeles volando poder expresarlo con soltura. No sé. Sinceramente no lo sé. Cazo ideas como con una red entretejida de pensamientos y sueños, pero en los sueños soy el cazador y la mariposa. Soy quien ama y es amado. Y al verme en tal sitio no hallo las palabras pertinentes para decir cuánto, cómo; qué. Es como ser el arco y la flecha; el arquero y la flecha; la flecha y el blanco. Todo junto y al mismo tiempo. Amor. Amado. Amante. Y soledad: Me hacés falta... Y existe, cómo no nombrarlo, el tan susurrante y acuciante deseo, esas estrellas interiores que se agolpan y explotan en la sangre y la rebelan ante la muerte vulgar, y en contra del tedio y la condena de todos los días sin miel, o con la miel postergada y prometida para vaya a saber cuándo, cuándo. Existe ese dios, y lo digo sin temor ni temblor, sin pudor y sin ley, que se alejó de los templos para darle al cuerpo su piedad y su justicia... ¿Pero dónde está ahora?... ¡Qué justicia! Existen, y eso es lo más seguro que tengo, estas palabras minúsculas, también condenadas, que quisieran ser por un rato, más que una pulsión de la vida un encontrarse con vos, con el beso de quien me espera -si es que todavía estás esperando-, con el cuerpo de mi amada. Existe este dios maldito que añora mi piel de tanto aguardar algo del cielo que está ahí, afuera: aludido entre cartas platónicas y deseos inabarcables, del tamaño y el perfume de esa magnolia que deshoja ahora sus flores blancas en la tierra del tiempo. Existe, sí, cómo no expresarlo, esta pena de andar con el alma encendida, sin poder tocar, con esta mano que escribe, acaso tu mejilla, tus manos, tu pecho,la cáscara que encubre tu corazón... Y me arde, me arde por vos. Esta es mi celda de piedra. Esto es mi aparentar que lo soporto todo, que por ser un reo inocente, y quizá un artista de la soledad, debo postergar este deseo que arrasa, esta necesidad. Tengo, amor, un solo canal por ahora. Son estas líneas insurrectas que pretenden romper los grilletes y decir te necesito, te quiero cerca. Y hablo también desde la ternura que siempre está presente. Pero cómo llegar hasta vos, de qué manera abrirme paso en este tiempo de distancia y reclusión obligada y abrazos que no son. Estoy solo, y casi no se entiende. Cómo puede ser, cómo es posible el amor así, cómo yo puedo amarte sin saber dónde estás, dónde estás ahora. Y hay cosas que no sé expresar bien, incluso cuando siempre me expreso como si estuviera tocando blues. Soy un hombre sencillo detrás de esta celda que mata, de esta carta que pareciera supurar todo ese deseo irrefrenable, esa piel que hay en mí, un corazón que late a pesar de todo. Es lógico que haya entre estas líneas una vibración, un querer estar, compartir, vivir. Y vivirte. Pero cómo ves, ahí anda rondando el perro. Ese gusano que una vez quizá quiso ser aviador, ese búho de la muerte que de niño miraba los pájaros y las golondrinas porque su voluntad era la libertad y su poder una canción. Y ahí está, paseándose por los pasillos entre las celdas, vigilante de vidas apagadas, tan oscuras como la suya. Ese perro carcelero y vigía, a quien le debo las gracias por hacerme el favor de recibir estas cartas que tal vez él mismo quemará. Ese ser despreciable que vive preso como yo, pero condenado por el destino y no por la buena o mala justicia de los hombres. Me pregunto si estás ahí. ¿Existís todavía? ¿Existo? ¿Estoy loco entonces? Una vez te vi en la estación; otra fuiste vos quien me vio ante el tribunal. Yo sigo pensando que no me abandonaste, que no te hicieron creer la mentira. Algo me dice que las cartas van al fuego. Que ese perro se ocupa de leer estas líneas, que se ríe de mí y de nosotros, y las echa al calor de una chimenea negra. No recibo visitas de nadie. Solo alguna vez tu fantasma se desplaza etéreo por el patio, y te miro y estás entre triste y viuda. Sin embargo, tengo una esperanza. Si esta última carta, si este último intento de carta pudiera atarse a la pata de una de las tantas tontas palomas que a menudo se posan sobre la línea que rompe la libertad en dos…; tal vez si alguien encontrara una paloma marcada con el mensaje de esta carta desesperada, no me importaría seguir comiendo polenta con salchichas por una eternidad. Esa es mi rebelión contra este mundo muchas veces poco listo; esta es mi subversión, mi osadía, mi puño en la altura. Este es mi afán de utopía y repudio a esas renuncias que buscan al paso ligero y superficial desmantelar esa verdad que es nuestro amor. Nuestro amor existe, de eso no tengo dudas, mi cielo. Pero el amor no como conquista, como colonización; aun en el fracaso de lo no correspondido, de las cartas al fuego, el amor vive y se desvive como un témpano que arde, arrastrado por el curso de la vida, penando, o lleno de felicidad; pero peregrino al fin, que no repara en las cenizas. Este amor no pretende éxito, condición o fortuna, aunque de todas formas sea desde luego una victoria, un triunfo de la vida contra la muerte, o contra y a pesar de la soledad y estas salchichas. Este amor es un jugarse por vos, con o sin suerte, pero un estarse jugado el todo por el todo, sin saber si habrá lugar para uno en esa tierra, que ahora solo son pájaros y un lienzo luminoso. Todo lo que arde no se mide con números, ni estadísticas, ni ciencias, ni recetas; todo lo que mida o sirva para medir no puede medir al amor y esto que vivo desde lejos; porque el amor es una victoria después de la batalla pero antes de la guerra; y en tanto victoria no tiene medida, grilletes ni estatutos. No hay ley, no hay manuales que encontrar, ni libros que lo expliquen, cariño. Quién tiene derecho, quién autoridad para decir entonces cómo y cuándo, y por qué y por cuánto... El amor es irracional pero no reo como yo, es una vibración desde la profundidad de la vida que batalla por sí misma para ser; es eso que me abrasa y me abraza con pasión desde un sitio sin guerra pero lleno de voluntad y de poder, por lo menos este poder que es la palabra, estas palabras. Esa voluntad es mi pasión; esa pasión, mi osadía; esa osadía me mueve, y me rebela. ¿Estás? ¿Seguís ahí, amor? Mis días se han transformado en juntar rayitas en la pared de mi celda, esa manera de dominar el tiempo cuando él pretende doblegarnos a todos los días un domingo. Las noches pasan. Los días pasan. Las horas pasan. Tu nombre, entretanto, se hace cada vez más difícil de sortear. Cada vez más sos vos en mí, esa idea repetida de vos en mí, esa idea suculenta que me empacha y me hace incorregible. Amar, sí, de eso se trata; eso quiero, pero no tengo medios para hacerte vivir en mí, traerte a este rincón del infierno. No lo sé. De verdad no lo sé. A veces pienso y recorro aquellos nuestros días como si fueran cosas pequeñas y sin importancia, pero he visto que hasta el mínimo beso que me dabas de lleno en la boca cada mañana tiene un rigor inevitable que me atormenta. Vos fuiste la luz, y yo la sombra que necesita del rayo siempre para reverdecer sus laderas. Recordá cuando nos conocimos. Ese café que compramos en Colombia. Los besos que me diste siempre en cada amanecer. No es que te encontré como buscando las luciérnagas en el campo; no salí en realidad con una caña a traerme el amor, a dejarte la luna. Tampoco fue al revés que vos elaboraste el plan frío y bien pensado de cómo dejarme con el corazón plebeyo entre tus reinas manos. Nada de eso pasó así. Quizá fue que aquel día de febrero varias estrellas enlazaron y tejieron con serpentinas y guirnaldas el deseo, el destino. Y entonces tu sonrisa cambió para siempre la mía. Ahora los hombres han separado lo que el destino unió. Espero que esta paloma boba entienda que es una mensajera. Ojalá alguien me adivine la intención y te haga llegar la carta. Donde quiera que estés. Sabés que soy inocente.
La última voluntad de Luis Alberto Spinetta fue que sus cenizas fueran echadas al río en el lugar del Parque de la Memoria, es el lugar donde se desarrolla el videoclip, conmovedor y emotivo.
Uno de los mejores álbumes de Calamaro, sin desmeritar lo anterior y lo de ahora
Totalmente!!
Si hay alguien que sabe homenajear a sus amigos y compañeros son vos Sr. Andres Calamaro. Este tema y el que le hiciste a Miguel Abuelo es excepcional.
Es a Spinetta
"y el que le hiciste a Miguel abuelo". Lee compañero@@eniorolandolopezhernandez3254
Boa tarde!! Sou Porto Alegre, Brasil. Me encanta o trabalho de Andres Calamaro. Gracias!!
Ele e masa não, é? ☺
@@irinanabokov4872 00p
CADA VEZ que escucho esta cancion algo se destroza dentro de mi, te extraño tanto papa, perdoname, lo siento
me gusta mucho este album ,creo que es el mejor de esta decada o al menos de este tiempo ,y los antiguos en su epoca con himnos ya conocidos es mi favorito
Cancion dedicada a nuestro querido. Luis alberto. Spinetta
de solo escucharla echo a llorar..gracias por demostrarme que con tu ausencia valoro mas mi vida...te extraño mucho..
"CADA VEZ que escucho esta cancion algo se destroza dentro de mi, te extraño tanto papa, perdoname..."
Tu viejo, ya te perdonó!! Fuerza!!! Soy mamá y el perdón y el amor a nuestros hijos van de la mano!! Fuerza!!
el amor verdadero, el mas puro que pueda existir, se fundamenta en el perdon inmerecido
Semejante temón debe tener aún mas reconocimiento :D
No sé cómo explicarlo....pero me hace llorar mucho esta cansion .......gracias flaco
Bella canción, bello video, bella voz !
Saludos desde Brasil !
Gracias por la amistad y por la GENIALIDAD FLACO ETERNO !!!!!!!!!!!
Si sabemos que nacimos condenados, ¿porqué somos tan sensibles al amor?
Que mágico que sos Andrés, cómo explicar lo agradable que es oírte.👏👏👏
Hermosa canción para escuchar en los últimos instantes y dejar volar el alma💙
sos abuelo calamaro ,, te juro sos un crack ,,, el abuelo estaria orgulloso nos diste voluntad y no tanta jaja pero te seguimos ,,,
"y en embrujo de tu canto, de pájaro cantor... que echo a volar..."
Te amo, Andrelo
Gracias Calamaro !!! Cómo siempre!!!💓
Que arte carajo!!! 👏🏻👏🏻👏🏻
Por ponerle armonía a la ciudad
Por la mágica y perfecta melodía
Spinetta vive en nuestras almas .gracias andres x esta hermosa canción
Genial Calamaro !!!! En esta su voz se parece a la Diego Vasallo (Duncan Dhu)
Sera que son de la misma gran generacion.?
Este tema te parte el alma 😭
Eres un poeta Andres
Buenisimoooo......
Y me quedo sin palabras...
Emoción pura ! Grande Andrelo!
Increíble lo mejor que me sucedió es conocer su música
me encanta!
Estupenda esta cancion
Eres un capó andrelo 😊
A spinetta, con amor
Me estremece tanta cruda verdad
¡MUY BUENO! ¡UN GRANDE DE VERDAD!
Elijo esta canción escuchar
El querido Andrés nunca negó su influencia que tuvo Dylan sobre él. Aquí un ejemplo.
ETERNO EL FLACO QUERIDO!!
Andrés Calamaro un fuera de serie artista cómo los que ya no hay la cultura agoniza y acá llenan estadios sólo para ver 22 tipos correr detrás de una pelota.Una sin razón no olvidemos que somos que crucifica a sus ídolos por caso Diego Armando Maradona y lista sigue me quedó el sabor de la escucha de BOHEMIO DE UN BOHEMIO
Hermoso Andrés 👏
Con muy poco afecto Te entregue tanto afecto sin esperar tu aprecio Caminamos juntos un tiempo y aunque ya no estas Aquí estas
grande
Hermosa canción,que músico de la ostia
sublime
`,,'
Para el amigo Luis Alberto Spinetta 🌟
enorme andrelo
Y reconocer mirando fijamente al sol, tu última mirada...
Qué canción elegiste escuchar...
Feliz cumpleaños salmón
Ensima que aora estamos en
genial
hola
el mejor homenaje hecho canción al gran Flaco Spinetta
@robertoerrasti5844 Spinetta y Andrés se hablaban o para nada ?
@@nahup944 Andrés participó en el disco "privé" de Spinetta y en alguno más tamb, ahora no lo recuerdo. Se debían llevar bien nose si hablarian seguido pero se respetaban mucho, hay un fragmento de Calamaro diciendo algo como "Creo que a Spinetta no le gustan mucho mis discos porque los nombra poco, pero a mi me gusta todo lo que hace Spinetta..."
Hasta los HUEVOS. HASTA LOS HUEVOS!!!!!!!!
👌💕
😎😎😎
Por el joint
Una carta desesperada y veinte mil polentas con salchichas
Tengo estos papeles como ideas desbordadas que, desde algún lugar mío e insospechado, flotan sobre mi cabeza… Arrojadas, desteñidas pero luminosas. Darían tantas respuestas como preguntas hay. Pero que por sobrevolarme, mujer, nunca serán capaces de responder, de responderme, de acaso responderte, cariño. Alzo las manos como queriendo atrapar lo que no se resuelve, el problema inexorable, implacable, moneditas que se caen o como campanas que suenan a deshoras. Y el lenguaje siempre vulgar y tonto, vasto, sí, pero vulgar, demasiado prolijo y harto inefable para lograr decir lo que me pasa por entre las cejas, el corazón, entre estos herrajes contra la libertad. El amor. Cómo describir eso que me sostiene entre estas paredes. Con qué pájaros, con qué papeles volando poder expresarlo con soltura. No sé. Sinceramente no lo sé. Cazo ideas como con una red entretejida de pensamientos y sueños, pero en los sueños soy el cazador y la mariposa. Soy quien ama y es amado. Y al verme en tal sitio no hallo las palabras pertinentes para decir cuánto, cómo; qué. Es como ser el arco y la flecha; el arquero y la flecha; la flecha y el blanco. Todo junto y al mismo tiempo. Amor. Amado. Amante. Y soledad: Me hacés falta... Y existe, cómo no nombrarlo, el tan susurrante y acuciante deseo, esas estrellas interiores que se agolpan y explotan en la sangre y la rebelan ante la muerte vulgar, y en contra del tedio y la condena de todos los días sin miel, o con la miel postergada y prometida para vaya a saber cuándo, cuándo. Existe ese dios, y lo digo sin temor ni temblor, sin pudor y sin ley, que se alejó de los templos para darle al cuerpo su piedad y su justicia... ¿Pero dónde está ahora?... ¡Qué justicia! Existen, y eso es lo más seguro que tengo, estas palabras minúsculas, también condenadas, que quisieran ser por un rato, más que una pulsión de la vida un encontrarse con vos, con el beso de quien me espera -si es que todavía estás esperando-, con el cuerpo de mi amada. Existe este dios maldito que añora mi piel de tanto aguardar algo del cielo que está ahí, afuera: aludido entre cartas platónicas y deseos inabarcables, del tamaño y el perfume de esa magnolia que deshoja ahora sus flores blancas en la tierra del tiempo. Existe, sí, cómo no expresarlo, esta pena de andar con el alma encendida, sin poder tocar, con esta mano que escribe, acaso tu mejilla, tus manos, tu pecho,la cáscara que encubre tu corazón... Y me arde, me arde por vos. Esta es mi celda de piedra. Esto es mi aparentar que lo soporto todo, que por ser un reo inocente, y quizá un artista de la soledad, debo postergar este deseo que arrasa, esta necesidad. Tengo, amor, un solo canal por ahora. Son estas líneas insurrectas que pretenden romper los grilletes y decir te necesito, te quiero cerca. Y hablo también desde la ternura que siempre está presente. Pero cómo llegar hasta vos, de qué manera abrirme paso en este tiempo de distancia y reclusión obligada y abrazos que no son. Estoy solo, y casi no se entiende. Cómo puede ser, cómo es posible el amor así, cómo yo puedo amarte sin saber dónde estás, dónde estás ahora. Y hay cosas que no sé expresar bien, incluso cuando siempre me expreso como si estuviera tocando blues. Soy un hombre sencillo detrás de esta celda que mata, de esta carta que pareciera supurar todo ese deseo irrefrenable, esa piel que hay en mí, un corazón que late a pesar de todo. Es lógico que haya entre estas líneas una vibración, un querer estar, compartir, vivir. Y vivirte. Pero cómo ves, ahí anda rondando el perro. Ese gusano que una vez quizá quiso ser aviador, ese búho de la muerte que de niño miraba los pájaros y las golondrinas porque su voluntad era la libertad y su poder una canción. Y ahí está, paseándose por los pasillos entre las celdas, vigilante de vidas apagadas, tan oscuras como la suya. Ese perro carcelero y vigía, a quien le debo las gracias por hacerme el favor de recibir estas cartas que tal vez él mismo quemará. Ese ser despreciable que vive preso como yo, pero condenado por el destino y no por la buena o mala justicia de los hombres. Me pregunto si estás ahí. ¿Existís todavía? ¿Existo? ¿Estoy loco entonces? Una vez te vi en la estación; otra fuiste vos quien me vio ante el tribunal. Yo sigo pensando que no me abandonaste, que no te hicieron creer la mentira. Algo me dice que las cartas van al fuego. Que ese perro se ocupa de leer estas líneas, que se ríe de mí y de nosotros, y las echa al calor de una chimenea negra. No recibo visitas de nadie. Solo alguna vez tu fantasma se desplaza etéreo por el patio, y te miro y estás entre triste y viuda. Sin embargo, tengo una esperanza. Si esta última carta, si este último intento de carta pudiera atarse a la pata de una de las tantas tontas palomas que a menudo se posan sobre la línea que rompe la libertad en dos…; tal vez si alguien encontrara una paloma marcada con el mensaje de esta carta desesperada, no me importaría seguir comiendo polenta con salchichas por una eternidad. Esa es mi rebelión contra este mundo muchas veces poco listo; esta es mi subversión, mi osadía, mi puño en la altura. Este es mi afán de utopía y repudio a esas renuncias que buscan al paso ligero y superficial desmantelar esa verdad que es nuestro amor. Nuestro amor existe, de eso no tengo dudas, mi cielo. Pero el amor no como conquista, como colonización; aun en el fracaso de lo no correspondido, de las cartas al fuego, el amor vive y se desvive como un témpano que arde, arrastrado por el curso de la vida, penando, o lleno de felicidad; pero peregrino al fin, que no repara en las cenizas. Este amor no pretende éxito, condición o fortuna, aunque de todas formas sea desde luego una victoria, un triunfo de la vida contra la muerte, o contra y a pesar de la soledad y estas salchichas. Este amor es un jugarse por vos, con o sin suerte, pero un estarse jugado el todo por el todo, sin saber si habrá lugar para uno en esa tierra, que ahora solo son pájaros y un lienzo luminoso. Todo lo que arde no se mide con números, ni estadísticas, ni ciencias, ni recetas; todo lo que mida o sirva para medir no puede medir al amor y esto que vivo desde lejos; porque el amor es una victoria después de la batalla pero antes de la guerra; y en tanto victoria no tiene medida, grilletes ni estatutos. No hay ley, no hay manuales que encontrar, ni libros que lo expliquen, cariño. Quién tiene derecho, quién autoridad para decir entonces cómo y cuándo, y por qué y por cuánto... El amor es irracional pero no reo como yo, es una vibración desde la profundidad de la vida que batalla por sí misma para ser; es eso que me abrasa y me abraza con pasión desde un sitio sin guerra pero lleno de voluntad y de poder, por lo menos este poder que es la palabra, estas palabras. Esa voluntad es mi pasión; esa pasión, mi osadía; esa osadía me mueve, y me rebela. ¿Estás? ¿Seguís ahí, amor? Mis días se han transformado en juntar rayitas en la pared de mi celda, esa manera de dominar el tiempo cuando él pretende doblegarnos a todos los días un domingo. Las noches pasan. Los días pasan. Las horas pasan. Tu nombre, entretanto, se hace cada vez más difícil de sortear. Cada vez más sos vos en mí, esa idea repetida de vos en mí, esa idea suculenta que me empacha y me hace incorregible. Amar, sí, de eso se trata; eso quiero, pero no tengo medios para hacerte vivir en mí, traerte a este rincón del infierno. No lo sé. De verdad no lo sé. A veces pienso y recorro aquellos nuestros días como si fueran cosas pequeñas y sin importancia, pero he visto que hasta el mínimo beso que me dabas de lleno en la boca cada mañana tiene un rigor inevitable que me atormenta. Vos fuiste la luz, y yo la sombra que necesita del rayo siempre para reverdecer sus laderas. Recordá cuando nos conocimos. Ese café que compramos en Colombia. Los besos que me diste siempre en cada amanecer. No es que te encontré como buscando las luciérnagas en el campo; no salí en realidad con una caña a traerme el amor, a dejarte la luna. Tampoco fue al revés que vos elaboraste el plan frío y bien pensado de cómo dejarme con el corazón plebeyo entre tus reinas manos. Nada de eso pasó así. Quizá fue que aquel día de febrero varias estrellas enlazaron y tejieron con serpentinas y guirnaldas el deseo, el destino. Y entonces tu sonrisa cambió para siempre la mía. Ahora los hombres han separado lo que el destino unió. Espero que esta paloma boba entienda que es una mensajera. Ojalá alguien me adivine la intención y te haga llegar la carta. Donde quiera que estés. Sabés que soy inocente.
temonnnnnn....!!!!!!😎
El inicio es idéntico a la canción Negrita del álbum Honestidad Brutal.
Tal cual
De salon
En Donde es Este Lugar???
Se me hace que es el parque de la memoria. Estoy casiii segura.
Argentina, Buenos Aires, Capital federal, Parque de la Memoria.
Parque de la memoria
La última voluntad de Luis Alberto Spinetta fue que sus cenizas fueran echadas al río en el lugar del Parque de la Memoria, es el lugar donde se desarrolla el videoclip, conmovedor y emotivo.
😗😗😗😗😗
Suave!
Cuarentena😷😷
De pajaro cantor......
Ek kon nie glo dat Calamaro behalwe Jazaro gay of lesbies was nie ...
PROPAGANDA, TOL RATO PROPAGANDA
No se te cae una idea, no?
Todd Haynes se caga de risa de este video.
grande
Suave!