En la fiesta del Corpus Christi, les invito a acompañarme a un pequeño pueblo llamado Esperanza, donde una niña llamada María emprende un viaje de curiosidad y fe. Esta historia no solo nos ilumina sobre el misterio del pan y el vino, sino que también nos recuerda el amor infinito que Jesús nos ofrece en cada Eucaristía. Prepárense para descubrir el verdadero significado de esta celebración tan especial. ¡Vamos juntos en este camino de fe y devoción!