Hermenegildo "Herman" Olivera, conocido como "El Sonero del Siglo XXI"
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Nació el 30 de enero de 1959 en Newark, Nueva Jersey, hijo de padres puertorriqueños. Desde joven, se sintió atraído por la música latina, influenciado por artistas como Tito Puente, Celia Cruz y Ismael Rivera, cuyos discos escuchaba en casa. Estas influencias forjaron su pasión por el canto y lo llevaron a descubrir su talento para la improvisación, característica fundamental en un sonero.
A los 15 años, Olivera comenzó su carrera musical con la orquesta La Justicia y luego se unió a La Sónica, donde conoció al trombonista Jimmy Bosch, quien se convertiría en un colaborador cercano. Posteriormente, integró la orquesta Caramelo, y en 1979, se unió al Conjunto Libre, dirigido por Manny Oquendo y Andy González. Su primera grabación con esta agrupación, "Increíble" (1981), le permitió destacarse con el tema “Decídete”, marcando el inicio de su consolidación como sonero.
En 1983, Herman continuó su éxito con el Conjunto Libre al grabar el tema "Qué Humanidad," en el álbum "Ritmo, Sonido y Estilo," una canción que se convirtió en un clásico de la salsa. Tras dejar el Conjunto Libre en 1988, se unió a un nuevo proyecto liderado por Fernando Pastrana, con el disco "La Exclusiva", donde compartió el rol vocal con Roberto Mier. En esta producción se destacan temas como "Xiomara" y "Te Vi Pasar."
A principios de la década de 1990, Olivera participó en el álbum "Salsa Sudada," donde colaboró con figuras legendarias como Adalberto Santiago y Yayo El Indio, consolidando aún más su reputación. En 1993, regresó al Conjunto Libre para grabar "Ahora," destacándose en temas como "Tú Me Perteneces" y "Obsesión," reafirmando su estatus como uno de los grandes soneros de su generación.
En 1998, fue invitado por el pianista Eddie Palmieri a grabar el disco "El Rumbero del Piano," aportando su voz a éxitos como "Malagueña Salerosa" y "Oiga Mi Guaguancó." Ese mismo año, colaboró con Jimmy Bosch en el álbum "Soneando Trombón," interpretando "Otra Oportunidad" junto a Frankie Vázquez, reafirmando su habilidad para el soneo y la improvisación.
En 1999, Olivera y Bosch se reunieron para producir "Salsa Dura," donde Herman brilló con la plena "Impacto Tendremos." Esta producción también contó con la participación de los cantantes Frankie “Nene” Morales y Frankie Vázquez, consolidando su lugar en la salsa contemporánea. Paralelamente, ese año también participó en la grabación en vivo del CD y DVD "Eddie Palmieri & Friends," destacándose en "Palo pa’ Rumba."
A lo largo de su carrera, Herman Olivera ha sido reconocido como uno de los soneros más versátiles y dinámicos, capaz de mantener viva la esencia del soneo tradicional mientras explora nuevas fronteras musicales. Su estilo único, habilidad para la improvisación y profundo conocimiento de la música afrocaribeña lo han convertido en una leyenda viva de la salsa, respetado y admirado en todo el mundo