Luz Propia narra una parte de la trayectoria de Brígida Chautla Ramos, una mujer nahua que ha dedicado más de 40 años a la defensa de los derechos de las mujeres originarias combinando este trabajo con la preservación de la lengua náhuatl, la medicina tradicional y la partería desde la Casa de la Mujer Indígena Zihuachikahuak (Mujer sana, fuertes y valiente) y junto a su equipo de Zihuame Xotlametzin A.C., que en español es: Mujer luciérnaga.
En este proyecto se unieron Zayra, Xime, Mari, Yami y Celeste para hacer un reportaje sobre doña Brígida; dicho grupo recibe el nombre de Ixpokame, que se traduce del náhuatl como Jovencitas. Las Ixpokame también colaboran con la Biblioteca Comunitaria Los Pinos, donde están enteradas y ejercen sus derechos culturales, derechos que Chautla Ramos ha garantizado sin proponérselo mediante la regularización de la Casa de Reuniones de su colonia que hoy se usa para talleres de artes y otros temas.